𝐂𝐮𝐥𝐩𝐚 𝐌𝐢𝐚 [𝑵𝒂𝒕𝒔𝒖𝒐 𝑻𝒐𝒅𝒐𝒓𝒐𝒌𝒊 𝒙 𝑶𝒄]

ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟞

Tras la incómoda cena en la casa Todoroki, Natsuo y Giuliana decidieron que lo mejor sería enfocarse en lo que realmente importaba: su futuro juntos. Las palabras de Enji seguían resonando en la mente de Natsuo, pero no dejaría que las dudas de su padre afectaran lo que tenía con Giuliana. Sabía que era tiempo de seguir adelante, de comenzar una vida juntos como una verdadera familia.

Unas semanas después, Natsuo llevó a Giuliana a su primer chequeo prenatal. El aire fresco de la mañana les brindaba una sensación de tranquilidad, algo que ambos necesitaban después de tantos momentos tensos. Natsuo estaba emocionado, aunque trataba de ocultarlo un poco para no abrumar a Giuliana, quien parecía un tanto ansiosa.

─¿Cómo te sientes? ─le preguntó Natsuo mientras caminaban de la mano hacia el hospital.

Giuliana respiró hondo antes de responder. ─Nerviosa, pero bien ─dijo, sonriendo ligeramente─. No puedo creer que vayamos a ver al bebé por primera vez.

Natsuo le devolvió la sonrisa, acariciando su mano suavemente. ─Todo va a salir bien. Estoy contigo.

Una vez dentro del hospital, el médico los recibió con amabilidad y los guió hacia la sala donde le harían la ecografía a Giuliana. Natsuo estaba sentado a su lado, apretando su mano mientras el doctor comenzaba el procedimiento. El sonido del gel deslizándose sobre la piel de Giuliana llenó la habitación, y en cuestión de segundos, en la pantalla apareció una pequeña forma.

─Ahí está ─dijo el médico, señalando la imagen borrosa en la pantalla─. Su bebé está creciendo bien, todo parece estar en orden.

Giuliana contuvo la respiración y apretó la mano de Natsuo más fuerte. Sus ojos se llenaron de lágrimas cuando vio al bebé por primera vez. Natsuo, por su parte, no pudo evitar sonreír de oreja a oreja. Había algo surrealista en verlo, en saber que esa pequeña vida estaba creciendo dentro de Giuliana.

─Es increíble… ─murmuró Natsuo, su voz llena de asombro.

El médico les explicó algunos detalles más sobre el desarrollo del bebé y les imprimió las primeras imágenes de la ecografía. Giuliana se quedó mirándolas en silencio, aún procesando todo lo que acababa de suceder. Natsuo, por su parte, no pudo contenerse y besó la frente de Giuliana.

─¿Ves? Todo está bien ─le susurró.

Giuliana asintió, pero en sus ojos aún había un toque de preocupación. Mientras salían del hospital, ella finalmente habló.

─Natsuo… ─comenzó, con un tono más serio─. Sé que todo parece estar bien ahora, pero no puedo dejar de pensar en lo que va a pasar cuando nazca el bebé. Nuestros padres, las expectativas, todo…

Natsuo la detuvo suavemente en medio de la calle y le tomó ambas manos, mirándola a los ojos.

─No tienes que preocuparte por eso. No importa lo que piensen los demás, lo que diga mi padre, o lo que puedan decir los tuyos. Nosotros estamos haciendo lo correcto, y vamos a ser felices. Este bebé es lo más importante para mí, igual que tú. No voy a dejar que nadie arruine lo que estamos construyendo.