Giuliana había pasado todo el día con un nudo en el estómago. Desde que se enteró de que estaba embarazada, no había dejado de pensar en cómo decirle a Natsuo. Sabía que tenía que hacerlo, pero el miedo a su reacción y a lo que significaba para ambos la paralizaba.
Finalmente, después de horas de dudar, decidió invitarlo a su departamento. Necesitaba estar en un lugar tranquilo y lejos de los ojos de su familia, donde pudieran hablar sin interrupciones.
Natsuo llegó al atardecer, con una sonrisa suave que siempre lograba calmarla. Sin embargo, esta vez Giuliana no pudo encontrar consuelo en su mirada. Estaba demasiado nerviosa.
─Giuliana, ¿todo está bien? ─preguntó Natsuo al verla tan seria, mientras se sentaba en el sofá a su lado.
Giuliana tragó saliva, sintiendo que las palabras no salían con facilidad. Lo miró a los ojos, y el temor se hizo aún más fuerte, pero sabía que no podía seguir ocultándolo.
─Natsuo... ─empezó, su voz apenas un susurro─. Tengo algo muy importante que decirte.
Él la miró con una mezcla de curiosidad y preocupación. Giuliana tomó aire profundamente, buscando el valor que necesitaba. Finalmente, dejó escapar la verdad que había guardado dentro todo este tiempo.
─Estoy embarazada.
Hubo un momento de silencio en el que el tiempo pareció detenerse. Natsuo la observó fijamente, como si tratara de procesar lo que acababa de escuchar. Giuliana, llena de nervios, esperaba cualquier tipo de reacción, temiendo lo peor.
Pero en lugar de asustarse o enfadarse, Natsuo sonrió. Una sonrisa amplia, cálida y llena de emoción. Sin decir nada, se acercó más a ella, y antes de que Giuliana pudiera reaccionar, la envolvió en un abrazo lleno de ternura.
─¡¿De verdad?! ─preguntó, con la emoción palpable en su voz. Su sonrisa era contagiosa, y Giuliana no pudo evitar esbozar una pequeña sonrisa de alivio.
Natsuo se separó un poco de ella, sus ojos brillando de felicidad. Lentamente, con una ternura que Giuliana no había visto en él antes, acarició su vientre aún plano. Aunque no había nada visible, para él, ese simple gesto era significativo. El futuro que habían soñado juntos comenzaba a tomar forma.
─No puedo creerlo, Giuliana ─dijo, emocionado─. ¡Vamos a ser padres!
La besó con suavidad, como si en ese beso quisiera transmitirle todo su amor y alegría. Giuliana sintió una mezcla de emociones: alivio al ver su reacción, pero también una creciente preocupación.
Natsuo la miró con cariño, y sin dejar de acariciar su vientre, dijo: ─Te amo, Giuliana. Esto es lo mejor que podría habernos pasado.
Pero Giuliana bajó la mirada, su expresión ensombreciéndose. Aunque estaba agradecida por la reacción de Natsuo, no podía ignorar el miedo que sentía.
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𝐂𝐮𝐥𝐩𝐚 𝐌𝐢𝐚 [𝑵𝒂𝒕𝒔𝒖𝒐 𝑻𝒐𝒅𝒐𝒓𝒐𝒌𝒊 𝒙 𝑶𝒄]
FanfictionUna joven de origen humilde, se encuentra atrapada entre el amor y la tradición. Su relación secreta con Natsuo Todoroki, miembro de una de las familias más poderosas de Japón, pone en jaque las expectativas sociales de sus padres, quienes desaprueb...