Metamorfosis

Confusión

La manada se había vuelto más violenta y hostil con los días. Estaban haciendo ataques de manera más brusca y sanguinaria.

Oyuki se acercó a mí y me preguntó: -¿En qué piensas?.-

Yo la miré y le respondí: -Ellos saben cómo pelear, pero necesitan equipo adecuado para protegerse. No puedo permitir que sean despedazados.-

Oyuki sonrió y dijo: -Tú eres la diseñadora de moda ¡Iluminanos!.-

Me reí en silencio, y le dije: -Me temo que no existe ninguna tela lo suficientemente resistente como para no ser despedazada.-

Raphael apareció y dijo: -De hecho, sí existe tal tela. Se encuentra en Polonia.-

Mi boca se quedó abierta, seguí pensando unos instantes. Era peligroso, pero era la única opción para ayudar a la manada.

-Si mis cuentas no me fallan, tengo una reunión en Polonia dentro de tres días. Tengo que ir por mi teléfono.-

-¿En qué estás pensando?.- Me dijo Oyuki, mientras me veía extrañada.

-Se suponía que tenía que ir para una reunión de moda, pero si logro escaparme por un momento, podría traer la tela de la que hablas.-

Raphael asintió y dijo: -Entonces necesitarás muchos metros de tela.-

Me acerqué a donde guardaba mi teléfono y lo agarré. -Por eso conozco muchos vampiros, incluyéndote.-

Llamé al teléfono a Patricia. Esperé tres tonos y finalmente escuché su voz. -Hola, Patty, ¿mi invitación para Polonia sigue en pie?.-

Patricia respondió: -Por supuesto, nada ha cambiado.-

-Bien.- Continué. -Necesito que hagas una reservación para dos cuartos, ya sabes cómo me gusta.-

Ella me respondió: -¿Irás acompañada?.-

Yo suspiré y respondí: -Es un evento importante, necesito un maquillista profesional, tal vez dos.-

-Tal vez podría ir Jonathan, ¿no crees?.- Dijo Patricia.

Respondí con determinación: -¡No! No irá, encárgate de eso.-

-René.- Me dijo Patricia. -Hablo como tu amiga, no como secretaria. Te extraño.-

-Yo también. Y volveré, pero ahora necesito tener mi espacio.-

Me hacía falta su amistad, también necesitaba enfocarme en mi vida.

Comencé a escuchar como alguien le quitaba el teléfono a Patricia. Por un instante, todo estaba en silencio.

-René.- Escuché en la línea. Me di cuenta de que era Jonathan.

Jonathan continuó: -René, no sabes cuánto he tratado de localizarte. Te he llamado a todos tus números y nadie sabe dónde estás.-

No podía negar que había intentado evitarlo. -Lo sé, pero estoy en medio de algo importante.-

-Siempre estás ocupada.-

-Más aún ahora, necesito que estés tranquilo, prometo que volveré a la boda.- Luego miré hacia Oyuki y Raphael, que se estaban mirando fijamente. ¿Era algo de lo que debía preocuparme?

-René.- Dijo Jonathan. -Quiero verte, necesito verte.- Sus palabras me tocaron, pero aún así sabía que tenía que seguir adelante.