Capitulo 7

388 46 7
                                    

—Ahora son cadetes. —La voz de Xaden resuena por todo el patio, imponente y dominante, eclipsando a las demás. Su tono está cargado de autoridad, y cada palabra se siente como un golpe de realidad.

—Miren a su pelotón. Estas son las únicas personas que el Código garantiza que no los matarán. Pero que ellas no puedan acabar con su vida no significa que otras no lo harán. ¿Quieren un dragón? Gánenselo.

La multitud estalla en vítores, una ola de entusiasmo que recorre el patio como un maremoto. La energía es palpable, casi eléctrica, pero yo estoy atrapada en mi propio mundo, paralizada por la presión que ejerce su presencia. Mis labios permanecen sellados, mi corazón late con fuerza, y mi mente está centrada en lo que está en juego.

Yo no tengo nada que celebrar. Me sumerjo en el caos de la situación con un peso abrumador en el pecho. Mi hermana, Violet, está inmersa en un plan que ni siquiera sabía si funcionaría. Cada paso que doy en esta dirección está marcado por la incertidumbre y el miedo.

Sabía perfectamente que mi madre podría aparecer en cualquier momento por las puertas principales, con Violet a su lado, y eso no lo permitiría jamás. La posibilidad de que mi madre descubriera lo que hice, que viera a Violet en el Cuadrante de escribas cuando debería estar en el de jinetes, me atormenta constantemente.

Hoy, sesenta y siete personas cayeron o murieron de una u otra manera. Sesenta y siete, como Dylan, cuyos padres ahora irán a recoger sus cuerpos o a ver cómo los entierran al pie de la montaña bajo una piedra cualquiera. La realidad de las pérdidas me golpea con fuerza, y no puedo obligarme a unirme a los vítores que celebran nuestra supervivencia mientras lamentamos su sacrificio.

Mis ojos se encuentran con los de Xaden, y una oleada de incomodidad me invade. Siento un retortijón en el estómago, pero él rápidamente desvía la mirada, como si quisiera dejarme con ese sentimiento de inquietud.

—Y apuesto a que se sienten muy rudos en este momento, ¿verdad, primerizos? —su voz resuena con una mezcla de burla y desafío, amplificada por el eco del patio.

La multitud responde con más vítores, una mezcla de alivio y arrogancia que parece llenar el aire. Xaden continúa, su voz cargada de una autoridad implacable.

—Se sienten invencibles después de lo del parapeto, ¿no? —grita, su tono lleno de desdén—. ¡Creen que son intocables! ¡Están en el camino para ser parte de la élite! ¡De los pocos! ¡De los elegidos!

con cada declaración de Xaden, una nueva ronda de gritos emocionados estalla, resonando cada vez más fuerte. Pero no son solo gritos de emoción; también es el sonido de unas alas obedientes batiendo en el aire, un retumbar majestuoso que hace que el suelo parezca vibrar.

Un grupo de dragones comienza a desplegarse ante nuestros ojos. La vista es sobrecogedora, un espectáculo de poder y belleza inigualable. Sus escamas brillan bajo el sol, reflejando una variedad de colores que parecen cambiar con cada movimiento, creando una sinfonía de destellos iridiscentes en el aire. El rugido bajo y resonante de sus alas al batir llena el espacio, creando una atmósfera de asombro y reverencia.

—Ay, dioses, son hermosos —susurra Rhiannon junto a mí, su voz cargada de admiración. Su mirada fija en los dragones revela un anhelo y una fascinación que no puedo evitar compartir.

Me quedo con la boca abierta, incapaz de apartar la vista de la escena que se despliega ante mí. En los cinco años que llevo viviendo aquí, nunca había visto algo como esto, aunque, por supuesto, nunca se me había permitido presenciar lo que sucede en el Día de Reclutamiento. La majestuosidad de los dragones es más impresionante de lo que había imaginado.

Algunos cadetes gritan de emoción y sorpresa. Supongo que todos quieren ser jinetes de dragones hasta que están a solo unos metros de ellos. La realidad de enfrentarse a estas criaturas imponentes cambia la perspectiva de muchos.

Alas de fuego (fanfic saga Empireo "alas de sangre")Donde viven las historias. Descúbrelo ahora