CAPÍTULO 18: VOLVER A CASA.

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Tras cruzar la puerta , el ruido era ensordecedor, Gorka no soportaba el humo y olor a tabaco, y por supuesto, mucho menos a la gente. Tenía una única misión: dar el regalo a Martín y salir de ese horrible sitio y volver a casa. Al dar unos pocos pasos entre la multitud , buscó con alguna esperanza, encontrar a sus amigos o al menos ver alguna cara conocida. No tardó en percatarse que a pocos metros, estaba su compañera de pupitre Vanesa, bailando sola.

Pensó en acercarse hacia ella, y que le diera el regalo que ella custodiaba, pero se miró su camisa y sus pantalones y al sentir verguenza optó por dirigirse hacia el guardarropa. 

Vanesa que lo había visto entrar y que se hacía la sueca, no entendía por qué no se le acercaba, porque ciertamente, la debía de haber visto tan solo al entrar en la discoteca. Y con disconformidad, pues lo llevaba esperando toda la noche, lo vio alejarse rápidamente.

Durante el camino se encontró a Rafa, que estaba  de rollo con una pelirroja y a pocos metros de él, pegado a una pared, se encontraba Héctor,  con una chavala del barrio donde vivía él. Héctor si lo saludó, pero no lo abrazó porque  Gorka tenía malas pintas, pues estaba sucio, chorreado, mugriento.

Gorka le preguntó si había visto a los demás y  este le indicó el lugar exacto donde se encontraban el resto del grupo, donde había estado él y Rafa parte de la noche y mientras lo buscaba , divisó, que no muy lejos de allí, antes de llegar a sus amigos , que se hallaban en la zona de fumetas por excelencia, tenía que pasar cerca de un grupo de chicas donde estaba Mar, la cual había hablado recientemente.

Con más vera, se despidió de Héctor y después, pasó al lado de Rafa,  que estaba liándose ( a este dándole dos cocotazos en la cabeza y ni se inmutó) y se apresuró camino  del guardarropa.

En la barra del guardarropa , había dos tipos , uno era un hombre, rechoncho, de barba cerrada, que vestía muy  hortera, y  de unos 40 años , aunque puede que tuviera algunos más. Llevaba colgado a su cuello una cámara kodak DCS 100 (Kodak Professional Digital Camera System), y estaba escuchando con mucha atención lo que le contaba un tipo joven,  moreno, alto y muy delgado. Iba muy trajeado, tenía pinta de ser algún tipo de jefe, o de mucho dinero. Detrás de la barra había dos chicas , no más de dieciocho cada una. La primera era una  rubia llamativa que estaba apoyada en la barra , escuchando con apatía la conversación de los hombres y  deseando con mucha fuerza que se fueran. Y saliendo de ella , una chica morena, rolliza, con un gran escote. Y esta  con un gesto , hizo entender a su compañera que se iba a tomar algo. 

Mientras Gorka se acercaba podía escuchar la conversación de ambos, pues en esa zona no  había altavoces y al menos podía descansar sus oídos.

 - Claro que sí , aclaraba el hombre trajeado y enjuto, - algunas personas consideran que las discotecas y las salidas nocturnas son una forma de escapar de la vida cotidiana. Una discoteca es un lugar donde se forman comunidades temporales donde las personas pueden representar fantasías, fingir ser alguien que no son y, durante un cierto período de tiempo, escapar de su vida cotidiana. Por lo tanto, las personas ven la experiencia de ir a discotecas como un método para divertirse de una forma separada del resto de sus vidas y esta es otra razón por la que la gente va a discotecas.

- Celebrar y divertirse con amigos también es una causa muy poderosa de diversión. - Le respondió el hombre barbado, mientras se limpiaba las gafas de pasta.

- Esa diversión es  causada por la liberación de oxitocina (hormona del amor) que se produce cuando uno participa en actividades que crean vínculos, como bailar con un grupo de amigos. Esta oxitocina reduce el miedo y la ansiedad, lo que genera sentimientos de satisfacción y paz. Por lo tanto, no es de extrañar que la gente pueda disfrutar de ir a discotecas simplemente por la producción de esta hormona que surge como resultado de los vínculos sociales que se producen de forma tan natural en esos entornos.

- Yo te diría, que esta noche misma , más de algunos de estos chavales buscan otras alternativas, menos sanas y más químicas para divertirse. - Y ambos se rieron.

Cuando Gorka llegó,  solo estaban ellos dos y él se puso detrás de ellos, esperando a que los atendiesen. La chavala rubia esta dentro, detrás de las cortinas. El fotógrafo hizo un ademán para que Gorka se acercara , como queriendo decir, que ellos no estaban esperando, y él se puso al lado de ellos. De nuevo el hombre estirado, continuó con la conversación.

- Yo te adelanto si quieres, una teoría que tiene mi socio y la lleva a rajatabla, vaya donde vaya. - Se acercó  al barbudo y  le puso su mano en su  hombro, y le confesó : la razón es el baile.   Los humanos disfrutan inherentemente del baile y muchas sociedades lo incorporan como un aspecto importante del entretenimiento, la socialización y el progreso. Por lo tanto, mi socio plantea la hipótesis de que el baile se utiliza como una de las técnicas en las que las personas crean química entre sí, ya que las mujeres bailan para alentar a los hombres a bailar, ya que quieren aprender más sobre ellas y ver si existe una conexión mutua. También existe un vínculo entre el baile masculino y la capacidad masculina para luchar, lo que explicaría por qué una mujer desearía observar a un hombre bailar antes de decidir si es un buen partido para ella. Le gustaría saber si sería capaz de defenderla a ella y a sus hijos, pero sin verlo pelear realmente, ya que esto resultaría en numerosos daños. Si asumimos que esto es cierto, entonces el baile es una característica clave del ritual de apareamiento y, en consecuencia, un área designada donde la gente puede bailar, como una discoteca, se convierte en un lugar importante.

Gorka había escuchado con atención la conversación y si pudiera elegir, se quedaría con ellos dos lo que quedaba de tiempo.

- ¡Impresionante!, sin duda me has abierto os ojos. Yo sólo hacía las  fotos y jamás pensaba en todo el trasfondo  que hay más allá. Extendió su mano para que se la chocara y le dijo : Tomás , ¡para lo que necesites !, lamentablemente me tengo que ir a seguir con lo mío , que es el arte ; y el otro tipo le respondió que se llamaba Ramón. Y así se despidieron y abandonaron la barra , uno para seguir haciendo fotos y el otro salió de la discoteca, ya que a la persona que había venido a recoger, su hijo, no se encontraba aquí.

Laura, gracias a su sello pudo volver a  entrar a  Generador con interesante información sobre Raúl para Cristina. Pero antes, iría a soltar su chaqueta de cuero negro al guardarropa. Mientras se acercaba, y buscaba su ticket, a lo lejos, pudo distinguir a un joven de espaldas  esperando en la barra, y sosteniendo un paraguas rosa con su mano derecha. Su corazón se encogió, al imaginarse  de quien pudiera ser.

En ese preciso instante , las cortinas se abrieron y la chica rubia salió del interior, arreglándose el pelo  y a alzar la vista y  ver quien estaba esperando detrás de la barra exclamó:

-  ¡Hermano!

- ¿ Hermana?. -Cuestionó sorprendido Gorka.

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