Incompleto Universo

12. Oscuridad

Aila

Siento cómo la tristeza y la oscuridad se apoderan de mí, transformándome en una chica llena de pena y soledad. Cada día que pasa sin respuestas sobre Max se siente como una eternidad, y la angustia se convierte en un peso insoportable en mi pecho. Las ganas de saber qué está pasando me están volviendo loca, como si cada pregunta sin respuesta fuera un eco que retumba en mi mente.

Brandon ha sido mi ancla en medio de esta tormenta. Su apoyo incondicional me ha dado algo de consuelo, pero incluso su presencia no puede ahogar la desesperación que me consume. La desaparición de Max es un agujero negro en mi vida, y cada vez que intento pensar en él, mi mente colapsa bajo el peso de la incertidumbre.

Justo cuando creo que no puedo soportar más, la vida parece jugarme una broma cruel. Mis padres llegan, y su presencia solo añade más tristeza y preocupación a mi ya frágil estado emocional. Sus rostros están marcados por la preocupación, y aunque sé que se preocupan por mí, no puedo evitar sentir que su llegada es un recordatorio de lo que he perdido.

—¿Cómo estás, cariño? —pregunta mi madre, su voz suave pero llena de inquietud.

No sé si puedo responder. La verdad es que me siento más sola que nunca, atrapada en un laberinto de emociones que no puedo desentrañar. La tristeza se mezcla con la culpa, y la presión de mantenerme fuerte frente a ellos se siente abrumadora.

—Estoy bien —miento, aunque las palabras se sienten vacías en mi boca.

Brandon me lanza una mirada comprensiva, como si pudiera leer mis pensamientos. Su apoyo es un bálsamo, pero incluso él no puede llenar el vacío que ha dejado Max. La preocupación de mis padres se cierne sobre mí, y en el fondo, sé que están tan perdidos como yo.

—¿Has pensado en hablar con alguien? —sugiere mi padre, su voz llena de preocupación.

La idea de abrirme a un extraño me aterra, pero al mismo tiempo, siento que estoy al borde de un colapso. La tristeza y la soledad son mis compañeras constantes, y la presión de mantenerme fuerte se siente cada vez más pesada.

.....

Nada puede ser perfecto en esta burbuja de dolor y confusión. La atmósfera se vuelve tensa cuando mi madre, con su tono pasivo-agresivo, rompe el silencio. Su comentario me golpea como un puñetazo en el estómago.

—¿Es en serio que te tiraste de ahí por la muerte o desaparición de Max, o estás así porque ya estás cansada de vivir? De verdad, Aila, cada día me sorprende tu falta de memoria sobre querer vivir.

Las palabras de mi madre resuenan en mi mente, y siento cómo la rabia y la tristeza se entrelazan en un torbellino de emociones. Su falta de comprensión me hiere más que cualquier otra cosa. ¿Cómo puede pensar que mi dolor es una elección? ¿Cómo puede no ver lo que realmente estoy sintiendo?

—No es así, mamá —respondo, tratando de mantener la calma, aunque mi voz tiembla—. No es que esté cansada de vivir. Solo... no sé cómo lidiar con esto.

La frustración burbujea en mi interior, y la sensación de soledad se intensifica. La presión de sus expectativas se siente como una losa sobre mis hombros. Quiero gritarle que no entiende, que cada día es una lucha, que la desaparición de Max ha dejado un vacío que no puedo llenar.

Brandon me mira con preocupación, y su apoyo me recuerda que no estoy completamente sola, pero incluso su presencia no puede mitigar el dolor que siento.