Capitulo 11

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Entra Kakashi

Kakashi: Sal, Itachi, sal ya, temeroso. La aflicción se ha prendado de ti y tú te has casado con la desventura.

*Entra Itachi*

Itachi: Kakashi, ¿qué noticias hay? ¿Qué decidió el Hokage? ¿Qué nuevo infortunio me aguarda que aún no conozca? 

Kakashi: Hijo, harto bien conoces tales compañeros. Te traigo la sentencia del Hokage.

Itachi:  La sentencia, ¿dista mucho de la muerte?  

Kakashi: La que ha pronunciado es más benigna: no muerte del cuerpo, sino su destierro. 

Itachi: ¿Cómo, destierro? Sed clemente, decid «muerte», que en la faz del destierro hay más terror, mucho más que en la muerte. ¡No digáis « destierro»! 

Kakashi: Estás desterrado de Konoha  Ten paciencia: el mundo es ancho.

Itachi: No hay mundo tras los muros de Konoha, sino purgatorio, tormento, el mismo infierno: destierro es para mí destierro del mundo, y eso es muerte; luego « destierro» es un falso nombre de la muerte. Llamarla «destierro» es decapitarme con un hacha de oro y sonreír ante el hachazo que me mata.

Kakashi: ¡Ah, pecado mortal, cruel ingratitud! La ley te condena a muerte, mas, en su clemencia, el Hokage se ha apartado de la norma, cambiando en «destierro» la negra palabra «muerte». Eso es gran clemencia, y tú no lo ves.

Itachi: Es tormento y no clemencia. El cielo está donde esté Naruto, y el gato, el perro, el ratoncillo y el más mísero animal aquí están en el cielo y pueden verlo. Itachi, no. Hay más valor, más distinción y más cortesanía en las moscas carroñeras que en Itachi: ellas pueden posarse en la mano milagrosa de Naruto y robar bendiciones de sus labios, que por pudor virginal siempre están rojos pensando que pecan al juntarse. Itachi, no: le han desterrado. Las moscas pueden, mas yo debo alejarme. Ellas son libres; yo estoy desterrado. ¿Y decís que el destierro no es la muerte?. ¿No tenéis veneno, ni navaja, ni medio de morir rápido, por vil que sea? ¿Sólo ese «destierro» que me mata? ¿Destierro? Ah, Kakashi, los réprobos dicen la palabra entre alaridos. Y, siendo sacerdote, confesor que perdona los pecados y dice ser mi amigo, ¿tenéis corazón para destrozarme hablando de destierro?

Kakashi: ¡Ah, pobre loco! Deja que te explique.

Itachi: Volveréis a hablarme de destierro.

Kakashi: Te daré una armadura contra él, la filosofía, néctar de la adversidad, que te consolará en to destierro.

Itachi: ¿Aún con el «destierro»? ¡Que cuelguen la filosofía! Si no puede crear un Naruto, mover una ciudad o revocar una sentencia, la filosofía es inútil, así que no habléis más.

Kakashi: Ya veo que los locos están sordos. 

Itachi: No puede ser menos si los sabios están ciegos. 

Kakashi: Deja que te hable de tu situación.

Itachi: No podéis hablar de lo que no sentís. Si fuerais de mi edad, y Naruto vuestro amor, recién casado, asesino de Nagato, enamorado y desterrado como yo, podríais hablar, mesaros los cabellos y tiraros al suelo como yo a tomar la medida de mi tumba. 

*Llama a la puerta Karin*

Kakashi: ¡Levántate, llaman! ¡Itachi, escóndete! 

Itachi: No, a no ser que el aliento de mis míseros gemidos me oculte cual la niebla. 

*Llaman*

Kakashi:  ¡Oye cómo llaman!-¿Quién es?-¡Levántate,Itachi, que te llevarán!-¡Un momento!-¡Arriba! 

🖤La tragedia de Itachi y Naruto🧡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora