"Entre las ruinas del amor" (Temporada 1)

Dilemas y Desesperación

Caitlin sostenía el test de embarazo en sus manos temblorosas, y la línea que aparecía confirmaba lo que más temía: estaba embarazada. Su mente se nubló con pensamientos contradictorios. No era que estuviera triste por la noticia, pero la realidad del mundo en el que vivían ahora la abrumaba. Traer un bebé a este caos… ¿cómo podrían cuidarlo? ¿Qué clase de futuro tendría?

Mientras caminaba por la casa, perdida en sus pensamientos, llegó a la enfermería. Sus ojos se detuvieron en un frasco pequeño en la esquina de la estantería, lleno de pastillas para abortar. Un torbellino de emociones la envolvió, y antes de que pudiera pensarlo dos veces, las pastillas ya estaban en su mano. Sabía lo que significaban y, aunque parte de ella gritaba que lo pensara mejor, el miedo y la desesperación eran demasiado fuertes.

De vuelta en la casa, se encerró en el baño, mirándose en el espejo mientras su mente corría a mil por hora. La decisión la estaba desgarrando por dentro.

Caitlin: (susurrando para sí misma, con voz quebrada) 
_No puedo... no puedo traer un bebé a este mundo..._

Con el estómago revuelto y las manos temblorosas, decidió tomar dos pastillas. Pero tan pronto como lo hizo, el peso de su decisión cayó sobre ella. Apenas pasaron un par de minutos antes de que una sensación de náusea se apoderara de ella. Cayó de rodillas frente al inodoro y vomitó las pastillas.

Sentada en el suelo frío, se sintió invadida por la culpa. ¿Cómo podía haber hecho eso? ¿Cómo había llegado tan lejos?

Caitlin: (en voz baja, con lágrimas en los ojos) 
_¿Qué estoy haciendo...?_

Confundida y abrumada, salió de la casa en busca de aire fresco. Necesitaba espacio para pensar. Mientras caminaba por el refugio, su mente seguía en caos. Había tomado una decisión impulsiva, pero algo dentro de ella sabía que había sido un error.

Entretanto, Barry había regresado a la casa buscando a Caitlin. Al no encontrarla, comenzó a buscar por la casa, llamando su nombre, pero la respuesta nunca llegó. Cuando entró al baño, sus ojos cayeron sobre el test de embarazo, tirado en la encimera. Junto a él, las pastillas. Barry se quedó congelado, el mundo a su alrededor deteniéndose por un segundo.

Barry: (con un susurro incrédulo) 
_¿Qué… qué es esto...?_

El impacto fue inmediato. Su corazón se aceleró, y sin pensarlo dos veces, salió de la casa corriendo, buscando desesperadamente a Caitlin. No le tomó mucho encontrarla, caminando sola cerca del borde del refugio.

Barry: (con la voz entrecortada) 
_¡Caitlin!_

Caitlin se detuvo en seco al escuchar su nombre. Cuando se giró y vio la expresión en el rostro de Barry, supo inmediatamente que había descubierto todo.

Caitlin: (murmurando) 
_Barry…_

Barry: (acercándose con ojos llenos de dolor y confusión) 
_¿Qué demonios está pasando, Cait? ¿Qué es todo esto?_

Caitlin: (evitando su mirada) 
_Yo…_

Barry: (levantando la voz, furioso y angustiado) 
_¡Estás embarazada! ¿Y pensabas en... en abortar sin siquiera decírmelo?_

Caitlin sintió un nudo en la garganta. Las palabras de Barry la golpeaban como una tormenta.

Caitlin: (con la voz temblorosa) 
_No es... no es tan simple, Barry. Este mundo… este lugar. No es seguro para un bebé. ¿Cómo vamos a sobrevivir, mucho menos traer una vida nueva aquí?_

Barry la miró, incrédulo, sintiendo la desesperación en su pecho.

Barry: (gritando) 
_¡No puedes tomar esa decisión sola, Caitlin! ¡Es mi bebé también! ¡Mierda!_