Claro que, una siesta cuando el Sol estaba en sus cortinas como si fuera una llamarada en un incendio, en sí, no era una buena idea. Flash no estaba soñando, lo que sea que esté en la cabeza de los músicos cuando estaban sin nada, en su cabeza, con los rayos del Sol sobre sus ojos que, si no era una mentira que le contaron a su novia, eran más sensibles con las luces.
— ¿Flash?
Si no se dormiría, como Twilight cuando se acurrucó en sus sábanas, hace una hora, lo que le esperaba era un destino que sí era sincera, era más que lindo.
Estar con su mirada sobre la ojimorada que estaba, de espaldas, a él.
"Ella es la del cerebro, imbécil" Le recordó su cerebro cuando Flash consideró que usarlo como armadura, porque el Sol estaba siendo un asco, era una buena idea.
— ¿Sí, Twilight?
La ojimorada se giró, con cuidado. Su brazo estaba sobre su cintura, y no es como si le gustara que Flash se lastimara. Era suficiente con que su otro brazo esté adormecido porque le estaba abrazando.
—Me estoy derritiendo —le contó, con un mohín.
Y solo Flash sabe que tanta resistencia se necesitaba para que su rostro no se le acercara e, inmediatamente, se la comiera a besos. El guitarrista no sabe cómo Twilight es tan tierna.
—No es mala idea —le reconoció, con una caricia en su espalda. No recordaba si su camiseta era corta, o se le había subido—, si es que, quieres que te suelte —le agregó, como si fuera una broma.
Twilight rodó sus ojos.
—Esa vez que me caí...
— ¿Sabes que si duermes con una ventana que, está abierta, te dará un resfriado? —le comentó. La ojimorada le miró, como si le estuviera respondiendo con un "¿Crees que soy una idiota?"—. Princesa, tu hermano me da miedo. No creas que correré riesgos.
—Entonces, ¿no crees que es mejor que, la cortina, como si fuera un truco de magia, se moviera sola? Claro que, esta vez no sería magia. Lo haría mí novio —le dio como idea. El guitarrista fingió que no escuchó como Twilight usó su tono, más o menos, autoritario con él—. ¡Flash! —le chilló mientras se enderezaba—. ¡Me estoy quemando, Sentry! —continuó con sus quejas.
Y Flash, con su ceño fruncido, comenzó con las suyas.
— ¿Me llamaste Sentry?
Twilight, otra vez, rodó sus ojos.
Claro que eso sí se le quedaba.
—Flash...
— ¿Cómo se te ocurre llamarme Sentry? Mí nombre es Flash, Sentry es muy formal. Flash, Flash, Flash, mí nombre es F- ¡Princesa!? —le soltó, como un chillido cuando Twilight se le lanzó encima.
La ojimorada enarcó una ceja: — ¿Quieres que te llame, 'Princesa'? —le preguntó, con picardía.
Que Flash se tomará su tiempo en responderle, si era sincera, le intrigó: — ¿No cuento como uno, al ser, tu novio?
El guitarrista le miró mientras Twilight estaba buscando una respuesta.
—No lo sé —le dijo, como si nada. No es como si Twilight comenzara con bodas en su cabeza—, como tampoco sé, por qué, mí novio, no me cerró la cortina de su habitación.
— ¿No te gustan los atardeceres? —le preguntó.
Para la Princesa era sencillo: —Los atardeceres son lindos, si es que, no me están molestando los ojos.
—Eres afortunada, Twilight —le comentó, con sinceridad—. Si veo un rayo del Sol, me muero.
— ¿Por qué? —le frunció su ceño—. Creí que eso de los ojos claros era una tontería que Pinkie Pie, nos contó mientras estábamos en Equestria.
Flash tosió: —Bueno, no es como si se comprobara, con facilidad.
Y Twilight, le objeto: —En realidad, sí. Flash, ¿no quieres saber cómo es un atardecer? —le preguntó, con una sonrisa.
El guitarrista rio.
—Créeme que estar sujetando el cabello de, ya sabes quién —ni siquiera se molestaba—, en una fiesta porque se emborrachó, me es suficiente.
—No actúes como si ella no hiciera lo mismo contigo, Flash.
El guitarrista se encogió de hombros.
—No es como si fuera tan complicado.
Twilight le miró.
—Sunset siempre está cuidando tu chaqueta.
—Sunset siempre está esperando robar mí chaqueta, Princesa —le replicó.
Twilight soltó un bufido mientras cruzaba sus brazos: —En fin, ¿estás seguro que no quieres mirarlo? —le miró su ventana. Los rayos del Sol estaban bajando su intensidad.
—Cuando el cielo esté más oscuro, lo haré —le miró, con detenimiento.
La luz que entraba en su ventana, con los rayos de Sol que estaban desvaneciendo, se contrastaban con los colores en su cabello, con el brillo de sus ojos.
—Después de todo —le siguió, con eficiencia—, mí parte favorita de un atardecer, es cuando está oscuro. Tú sabes, el crepúsculo.
Twilight le sonrió, con diversión: —¿Sabes quién se llama así?
—Nop —le respondió Flash, con una sonrisa que más que boba, era delatora.
El guitarrista se enderezó cuando Twilight se acercó, un poco más, a sus labios mientras le recitaba un delicado: —Te quiero.
Así fue como nació 🫦. Cualquier error se edita este mismo día, o cuando edite todo el libro, depende 🫦☝🏻.
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cuando las estrellas se alinean ➳ flashlight
Romance❝Por un acto del destino, logré conocerte❞. Diversos relatos con Flash Sentry y la Princesa Twilight Sparkle, como protagonistas. * sin editar. Flufftober, 2024. Advertencias cuando sea necesario.