cuando las estrellas se alinean ➳ flashlight

Nueve ✦ Flores

Flash esbozó una sonrisa en lo que, con su amigos eran retirados, con unos cuantos cumplidos, del escenario. Eso era bueno. Y se transformó en más que bueno cuando el ensordecimiento que generaba la multitud, se deslumbró como una aclamación para que regresaran. Ni siquiera sus amigos se lo estaban esperando. Y Flash no sabía si esto era ser optimista, pero no le sorprendería que ese primer puesto acabara siendo de su banda.

Claro que no sabía si era suerte, como la que les entregaron las Rainbooms, con no ser concursantes. Según Rarity, Rainbow se enteró ni muy temprano, ni muy tarde, pero si lo suficiente como para que ni siquiera se los comentara. Flash sabía que sonaba mal, pero eso le estaba dando más esperanzas. No era algo organizado por Canterlot High, esto era por parte del Ayuntamiento de la ciudad. No recordaba el porqué, pero era sobre los adolescentes.

—Si no ganamos, me mato.

—Me encanta tu optimismo, Ringo.

Flash rodó sus ojos mientras se quitaba su guitarra, desajustando su agarre. Si él estaba aguantando soltar chistes, no comprendía cómo sus amigos no se callaban.

— ¡FLAAAAASH!

Bueno, eso era sencillo. Ellos no tenían a una Princesa que sí le escuchaba una broma como esa, se lo tomaría con seriedad. O al menos, si lo hacía más seguido.

Flash, en unos segundos, bajó su guitarra con uno de sus amigos, recibiéndola para que sin dificultad, recibiera entre sus brazos a Twilight que, con una sonrisa, se aferró en su cuello. O solo se aseguró. El guitarrista no notó cuando se colgó de su cuello. Sin embargo, no era una sorpresa que le sostuviera mientras daban unas vueltas. Sus brazos estaban en su torso como si sus dieciocho años en la Tierra, dependieran de eso.

Como también, una mirada más que amenazadora hacía sus amigos. Flash no era tonto. El sabía cual era, en específico, la formación que usaban para burlarse de, lo que sea.

— ¡Eso fue asombroso! —le chilló, con emoción cuando le bajó. Flash notó algo en sus manos, pero como continuaban sobre sus hombros, se centró en su rostro, en su mirada que destilaba como las estrellas—. ¡Y estuviste asombroso! ¡No! ¡Más que asombroso, eso es seguro! —le acercó, su rostro—. ¿Cómo es que eres más que asombroso? No es que no lo seas, pero —Twilight tomó aire, con una risita—. ¡Pero eso fue asombroso! ¡Ni siquiera sé cómo describirlo con otro adjetivo! —le siguió con unos cuantos saltitos.

Flash no tardó en acercarla, con sus manos entrelazadas en su cintura: —Entonces, ¿eso es un sí? ¿Qué sí te gustó? —le bromeó, y Twilight, con un rodamiento de ojos, le besó, con fuerza.

El guitarrista, con gracia fue escuchando como sus amigas comenzaban con unos quejidos porque Twilight, en serio que, no les esperó, porque no lograron que Applejack la sostuviera en lo que Flash Drive terminaba su turno, en el escenario, como también, porque se estaba besando con Flash. Un escándalo. Eso era demasiado. Flash fingió que Sunset no les soltó una tos, con fuerza cuando, sin querer, le profundizó ese beso. Ni siquiera fue una sorpresa que se les acercara, con otra tos.

—Twilight, ¿no crees que estás olvidando algo? —le señaló. Flash estaba concentrando en el mohín que su novia, le hizo—. La ceremonia comenzara en unos minutos —le avisó.

Flash miró, con curiosidad a Twilight.

—Gracias —le murmuró, con sus mejillas coloradas.

Twilight soltó una risita mientras una de sus manos era deslizada sobre sus hombros, con la otra siendo algo mas, acelerada.

Y Flash sintió como todo lo que estaba en él, sea lo que sea, era remecido cuando sus ojos se encontraron con un ramo de flores en las manos su novia.

—M-mí idea era que, bueno —Twilight bajó su mirada—. Esperaba que fuera cuando les entregaran su trofeo. Tú sabes. En otros minutos más —la ojimorada estaba confiada con ese triunfo—. Pero —le miró, con una sonrisa—, creo que mí entusiasmo fue más fuerte. La canción me gustó mucho —le agregó, con sencillez.

Flash se señaló, con sorpresa: — ¿S-son para mí? —le moduló, con dificultad.

La ojimorada asintió, con alegría: — ¡Claro que sí! —le acercó el ramo—. No eres alérgico a las rosas, ¿cierto?

—Créeme que, incluso si lo fuera, las aceptaría. Y solo porque eres tú —le soltó, rápido mientras las tomaba, con cuidado.

Les miró, con detenimiento mientras Twilight se balanceaba sobre sus zapatos mientras se reía, en silencio. Flash estaba seguro que su corazón se le saldría. La emoción era más que suficiente. Claro que como lo es una caricia en su mejilla, una caricia de la ojimorada para que se saliera de su atascamiento, con los latidos en su boca.

—Te amo —le dijo, con una sonrisa.

Twilight no tardó en acercarse con un beso en su mejilla.

—Yo también te amo, Flash —le respondió, con otros cuantos.

NO SABEN KUANTO LOS AMO. SON TAN. LINDOS.. NI SIQUIERA ESO LES SIRVE. FLASHLIGHT 🐺🐺🐺🐺🐺.

No les mentiré, advertencias en el que sigue 😣💪🏻.