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Javiera

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Javiera.

–Hija llegó el Jere —me aviso mi mamá desde abajo.

–Voy altiro.

Me puse perfume y después baje, estaba el Jere con la Noe en brazos mientras hablaban con el Tobal.

–Hola —me acerqué a el y nos dimos un piquito.

–¿Vas a llegar a dormir? —me preguntó mi mamá.

–¿Se puede quedar en mi depa?

–Sipo, mañana vengan a almorzar aca si quieren.

–Ya tía —le dijo el Jere.

–Voy a buscar ropa.

Subí a mi pieza y armé una mochila con ropa rápido.

–Listo, chao mami —me despedí de ella—. Chao —le di un beso en la mejilla a la Noe y al Tobal.

–Cuídense —nos dijo mi mamá antes de que cerraramos la puerta.

–Vine con los cabros —me dijo mientras caminábamos a la furgoneta.

–Bueno.

Ambos nos subimos.

–Hola Javi —me saludo el Mateo y el Furia.

–Hola —les sonreí amable.

Con el Jere nos sentamos, era una furgoneta en la que el Furia manejaba y el Mateo iba de copiloto.

–¿Cuanto nos queda pa llegar desde aquí? —preguntó el Jere.

–Estamos como a 1 hora ma o meno.

–Vai a tener que ponerle turbo compañero, mira que el show es a las 1 —le dijo el Mateo al Furia.

–Vamono tranquilos noma, si igual es temprano y aparte andamos con mi señora —dijo el Jere.

–¿El Jere no te ha llevado rápido? —me preguntó el Mateo mirándome y yo negué con la cabeza—. Ese weon si que se cree Toretto a veces.

–Ponte música po Mateo.

El Mateo puso "déjame pensar" del Cris con el Floy y le subió el volumen.

El Jere me abrazó por los hombros y me acercó más a él.

–¿Estai bien?

–Si —le di un beso en la mejilla—. Hueles rico.

–Pa uste po —me guiño el ojo y yo sonreí.

[...]

–Dame un beso pa la foto —me pidió el Jere.

Contigo - 𝐽𝑒𝑟𝑒 𝑘𝑙𝑒𝑖𝑛Donde viven las historias. Descúbrelo ahora