Javiera.
–Me siento incómoda —me acomodé en el asiento del avión.
–Venga —bajo la parte para apoyar los brazos.
–¿Cuanto queda de vuelo?
El miro a la pantalla y después me volvió a mirar.
–2 horas princesa.
–Quiero mi camita.
–Durmamos las 2 horas que quedan.
[...]
Llegamos a mi casa a las 8 de la noche.
–Hola mami —abracé a mi mamá.
–Hola Javi —me abrazó—. Hola Jere.
–Hola suegrita —se saludaron con un beso en la mejilla.
–¿Suegrita? —dijo el Cris.
–Ya es mi pololo —le di un beso en la mejilla al Jere.
–Felicidades compañero —el Cris y el Jere se abrazaron.
–¿Vienen cansados? —nos pregunto mi mamá.
–No tanto, dormimos en el viaje —le dije.
–Nosotros hicimos completos y les guardamos para que coman —nos dijo ella.
–¿Y la Noe? —preguntó el Jere.
–Esta durmiendo —le dijo el Cris.
Con el Jere nos comimos los completos mientras mi mamá nos preguntaba sobre el viaje.
–¿Y como te pidió pololeo?
–Me hizo una canción —sonreí.
–Tía, ¿mañana le puedo robar a su hija?, quiero que me acompañe a mi casa.
–Sipo, vayan nomas.
[...]
–Quédate quieto para que se seque —le termine de poner la mascarilla.
–Quédate aquí —me abrazó por la cintura.
–Bueno —le saque el pelo de su cara.
–¿Estas mascarillas son las que duelen?
–¿Y tu como sabes que estas son las que duelen? —lo mire entrecerrando los ojos.