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Javiera

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Javiera.

Nos juntamos con los demás en la recepción y vemos a todos vernos a mi y al Jere con atención.

–¿Y? ¿Que te dijo? —le pregunta el Furia.

–Ya es mi polola —dijo el Jere.

Los 3 abrazaron al Jere y se pusieron a saltar.

–Felicidades compañero —le dijo el Furia.

Después los 3 uno por uno me abrazaron.

–Te demoraste si —le dijo el Lucky y yo me reí.

–¿Tu crei? —me miro el Jere.

–Esta bien —le dije yo sonriendo.

–Ya cabros, vamonos si no el caballero nos va a dejar acá —dijo el Mateo.

Salimos del hotel y ahí estaba otra vez el caballero en el carrito.

–Hola —nos saludo—. Hoy vamos al mar y luego vamos a dar un recorrido.

–Hay que aprovechar el día —dijo el Lucky.

Yo con el Jere nos subimos al carrito y yo me fui de piloto de nuevo.

–¿Me dejariai manejar en tu auto? —le pregunté al Jere.

–Tendría que ver como manejas en auto normal primero.

–Si se manejar.

–En Chile vemos.

–Bueno.

Llegamos al lugar y estacionamos los carritos.

–Vamos al barco y dejan sus cosas, más tarde vamos a dar una vuelta —nos dijo el señor.

Nos subimos al mismo barco donde estuve ayer con el Jere.

–Ponte bloqueador —le dije al Jere.

–Me pones tu.

–Me voy a cambiar y te ayudo.

–Bueno mi amor.

Fui con mis cosas al baño y ahí me puse el traje de baño, ordene las cosas en la mochila y salí.

–Uff —dijo el Jere al verme.

–Me gusta más el otro —me arregle la tirita del traje de baño.

–Con cualquiera me dejai loco —yo sonreí y le di un besito.

–Vamos a ponernos bloqueador.

Fui a dejar las cosas y saque de la mochila el bloqueador.

–Date vuelta —le dije.

Contigo - 𝐽𝑒𝑟𝑒 𝑘𝑙𝑒𝑖𝑛Donde viven las historias. Descúbrelo ahora