Confesión

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No hubo tiempo para reaccionar ni terminar oraciones pues sus labios habían sido capturados sin previo aviso por su kitsune. Sentía como la escasez de aire afectaba su cuerpo pero no quería alterar este momento, este impulso desenfrenado que aún no lograba asimilar. De pronto aquella quimera con la que tanto fantaseo se hacía realidad, respiración agitada, mil palpitaciones por segundo, un aroma embriagador golpeando su nariz, un rostro porcelana unido al de él; era un sueño del que no deseaba despertar aún cuando ya no podía respirar.

- Ru..Ruka...Rukawa.- soltó con su voz entrecortada.- ¿qué haces?.- finalizó algo desconcertado frente tamaña acción.

Su cara prácticamente se hallaba del mismo color de su cabellera, no había manera de ocultar el rubor que se fusionaba con esta y apartando sutilmente a su compañero de equipo continuo.- Creo que será mejor que te vayas...

- No lo haré.- interrumpiendo al pelirrojo.
Este se levantó de la cama y buscando el estéreo quiso sintonizar alguna estación de radio que satisficiera su gusto musical, la batalla era ardua pues solo le bastaban 5 segundos de escucha para desaprobar cada melodía que entregaba el aparato.

- Terminará rompiéndose, déjame buscar a mí. 

En un intento fallido por arrebatarle el estéreo entre un tira y afloja, Hana terminó boca a bajo al piso siendo prácticamente el asiento para el n°11.
- Maldito bájate de encima a caso no recuerdas mi lesión en la espalda.

-....- Ignorándolo completamente.

- Rukawa, eres un odioso, quítate.- vociferaba tratando de zafarse de aquella incomoda posición.

- Porque tienes que ser tan escandaloso.- afirmó girando sus ojos.- Creo que ando con un casete en mi bolso.

Lentamente Kaede movió su cuerpo con la clara intención de fastidiarlo, tomó su bolso y comenzó a buscar entre sus cosas algo que los salvará del silencio que rodeaba el lugar.

- Mañana debes ir a entrenar, necesitas practicar las jugadas que el capitán planeó para enfrentar a Ryonan.

Hanamichi se acercó a él y mirándole desafiante desde las alturas respondió:  

  - ¿Así que necesitas de este talentoso para vencer a Sendoh? sabía que llegaría el día en que reconocerías mis habilidades para el Basketball.   

  - Idiota.- bufó.- puedo vencerlo sin ayuda de ustedes.  

 Se enderezó quedando a la misma altura del moreno y sin quitarle la mirada continuó...

- Tú, sin mí, jamás podrías derrotar a Ryonan.

Siguió su camino hasta tomar nuevamente el estéreo para cambiar un poco el ambiente; sin embargo, solo alcanzó a insertarlo pues sin mas se le fue  arrebatado de sus manos por su dueño.

- Yo quiero escoger la música... Y te equivocas, ahora si puedo derrotarlos sin tu ayuda.

- Avanza al tercer tema.- ordenó.

- Cállate Rukawa, pondré la que yo quiera.

Cogió la caja donde estaban escritos los temas que traía e inició su selección al azar adelantando el casete varios minutos, lo detuvo y le dio play.

- Eres un idiota, ni siquiera conoces los temas por eso te pedí la tres.
- Siempre es bueno escuchar algo nuevo.

Curiosamente el tema sonó desde su inicio y efectivamente Kaede sabía exactamente el contenido de la canción tan solo al escuchar la intro de esta y dudaba que hubiera sido la mejor elección. Sin querer entrar en detalles se acerco hacia la ventana que se hallaba cerca de la cama.

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⏰ Última actualización: Sep 22 ⏰

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Entre rivalidad y amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora