Capitulo 9: Verdad

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A la mañana siguiente, Ian despertó con un horrible dolor de cabeza. No recordaba nada de la noche anterior.
— ¿Dónde estoy? – Se preguntó a si mismo al notar que estaba en un cuarto desconocido — ¿Qué pasó anoche? – Miró a un lado suyo y se encontró con Félix durmiendo sin playera — ¿Félix? – Se sorprendió bastante y casi sale corriendo de la habitación.

— Buenos días, Ian – Sonrió Félix — ¿Cómo te sentís? Anoche tomaste demasiado — Mencionó acariciando delicadamente el caballo de Ian.

— E-estoy bien... Olvidando eso... ¿Qué pasó anoche? No lo recuerdo... – Preguntó Ian tímido.

— ¿No recordás nada? – Ian negó con la cabeza — En realidad... Solo te traje a un hotel porque sabía que no querías que tu madre te viera así... – Sonrió tristemente. Ian sabía que había algo más, pero no quería preguntar por detalles — Pedí servicio a la habitación, traerán desayuno y medicina para la resaca

— Bien, muchas gracias Félix – Sonrió Ian.

Después de desayunar, cada uno se fué a su casa.
Cuando Ian llegó, se encontró con Fede sentado en el sofá; sorprendente aún seguía así.

— ¿En dónde estuviste? – Preguntó Fede girando su cabeza hacia Ian, mostrando sus ojeras y ojos llorosos.

— Dormí afuera, nadamás...

— ¿Tanto te desagrada tenerme aquí? – Fede se levantó y se dirigió a Ian.

— Como podés ver...

Fede se quedó callado y se quedó mirando en un punto fijo — ¿Con quién estabas? — Preguntó molesto.

— ¿Por qué preguntas eso? – Ian estaba desconcertado.

Fede no dijo nada pero señaló a su cuello en un lugar específico — ¿Ahora te vas con cualquiera?

Ian dirigió su mano a donde Fede había señalado y sintió un pequeño dolor, el de un moretón, pero era pequeño, definitivamente era un chupetón, y sabía quién se lo había hecho.

— ¿Por quién me tomas? ¿Por un puto que va de hombre en hombre? – Ian realmente estaba enojado por el comentario de Fede.

— Te acostaste conmigo, ¿por qué no lo harías con otro? – Eso rompió a Ian y finalmente le dió una fuerte cachetada.

— Sos un boludo... – Dijo con lágrimas en los ojos — Aunque mi sentimientos no sean correspondidos, eso no quita el hecho de que nosotros éramos mejores amigos, Federico Vigevani... – Rompió en llanto.

Fede no quería hablarle así, su boca y sus celos hablaron por él cuando vió que tenía un chupetón de alguien más, y ese chupetón sabía que lo dejaron a la vista de todos para marcar territorio, molestando aún más a Fede.

— Perdóname Ian... – Sollozó Fede desesperado — Me molestó la simple idea de pasaras tu tiempo con alguien más... La verdad vine a Argentina por tí-... — Justo en ese momento entra la madre de Ian con compras.

— ¡Ian! ¿A qué hora llegaste? – Preguntó dejando sus compras en la cocina.

— Apenas...

— ¿Tenés hambre? ¿Querés que te prepare algo de comer? – Preguntó su madre preocupada.

— No, comí algo en el camino – Respondió con una sonrisa para no preocuparla tanto.

Después de su pelea con Fede, salió de la casa con la excusa de trotar un rato, pero en realidad corría con la esperanza de encontrarse a Félix y pedirle una explicación del chupetón. Podría preguntar por teléfono, pero quería hablarlo cara a cara.

Sorprendente y de mera casualidad se encontró con Félix sentado en una banca del jardín.
— Félix – Ian se paró enfrente de Félix y le habló seriamente.

— ¿Ian? ¿Qué hacés aquí?

— Necesito una explicación a esto – Ian señaló a su chupetón — Además no es lo único que hay, también me duele todo el cuerpo, y no me había dado cuenta por la cruda.

— Sobre eso... Antes de contarte, prometeme que no dejaremos de ser amigos... – Respondió Félix cabizbajo.

Ian asintió preparado para escuchar cualquier cosa, aún sabiendo la respuesta.

Cuando Ian cayó dormido, Félix lo llevó al hotel más cercano para que su madre no lo viera en ese estado. Pidió una habitación y acostó a Ian en la cama. Félix estaba a punto de irse cuando Ian lo abrazó por las espalda.

— No te vayas... – Susurró Ian con la voz quebrada — Quedate esta noche conmigo ¿si?

Félix no pudo resistir a esos ojos que le suplicaban quedarse y se sentó en un extremo de la cama, pensaba irse cuando Ian se quedara dormido.
Pero sus planes fueron arruinados cuando Ian empezó a desabotonar su camisa y el pantalón — Tengo calor – Dijo Ian arrastrando las palabras

Félix suspiró y lo ayudó a quitarse la camisa.

— ¿Quieres hacerlo? – Preguntó Ian colocando la mano de Félix de en su pecho desnudo.

Félix estuvo a punto de abalanzarse sobre él, pero sabía que Ian solo era así por el alcohol, así que negó rotundamente con la cabeza.
— Estas borracho, Ian, solo lo haces por el alcohol.

Ian se quedó callado — ¿Ya no te gusto? – Dejó mostrar unas lágrimas, quebrando a Félix — Si te gusto, entonces no hay porqué no hacerlo...

— Si, me gustas Ian, y no tenés idea de cuánto, pero aún así no me acostaré contigo – Respondió seriamente.

Entonces Ian lloró a mares como un niño berrinchudo — ¡¿Por qué no!?

Félix volvió a suspirar, y sabía que Ian no se calmaría al menos que lo complaciera.
Félix se acercó a las piernas de Ian y bajó los boxers de Ian, mostrando su lindo miembro. Pensándolo dos veces, le hizo una felación a Ian.

Ian se sorprendió, pero aún así no lo alejó, le gustaba tanto que no podía evitar soltar gemidos. Le excitó tanto que no pudo evitar correrse en la boca de Félix — Se sintió muy bien... – Comentó Ian intentando recuperar el aliento.

— Me alegro. Ahora que hice que te corrieras, duerme, yo me iré a otra habitación para que estés tranquilo – Sonrió Félix levantándose y colocando su abrigo.

— Pero... Aún no estoy satisfecho... – Ian jaló a Félix con fuerza y se subió arriba de él moviendo su trasero para excitarlo.

"Ni siquiera es consiente de quien soy, seguramente piensa que soy Fede" Pensó Félix casi a punto de lagrimear.

— Solo no te arrepientas mañana – Habló Félix seriamente.

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Continuará...
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Quieren que suba un capítulo 🔥 de Félix e Ian???? 👀👀 O lo dejamos a la imaginación??? 😶😶😶

Amor incondicional (Fedian)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora