Eres mía, princesa

Capitulo 49

Narra Feli:

Nunca me había sentido tan feliz.

Sostenía a Camila en mis brazos dormida mientras me perdía en mis pensamientos.

Miré la pared, imaginando la sonrisa de
Camila, el sonido de su risa, la suavidad de su piel.

Sonrei.

Se siente tan bien que esté acá conmigo después de todo.

Cerre los ojos, reviviendo cómo se sintió estar dentro de ella, tocarla y besarla por todo el cuerpo.

Me había despertado hace tiempo, pero nomquería despertarla. Se veía muy tranquila.

Estaba feliz sintiendo su piel desnuda
contra la mía. Podría quedarme todo el día así.

Su celular empezó a sonar.

Ella se movió y abrió sus ojos lentamente. Me miró y me sonrió.

-Buenos días- dijo y me dio un pequeño
beso en los labios

-Tu celular no dejó de sonar- dije- probablemente es tu viejo preocupado
preguntándose dónde estás

-No me importa- dijo- estoy más que bien

Se escondio más en mi pecho.

-Desde cuándo te convertiste en la chica
que no le importa nada y hace lo que
quiera?- pregunte y ella rió

-Desde que me di cuenta de que tengo que aprovechar cada momento- respondio- en especial, estos- dijo- los que comparto con vos

-No tenes idea de cuánto te extrañé, enserio- dije

-No lo creo- dijo mirándome fijamente

-Por qué decís eso?- dije confundido

La extrañé como el jodido infierno.

-Estuviste con Zoe- dijo- y estoy segura que con muchas chicas más

Sorprendido empecé a reírme a
carcajadas. Incluso tuve que tapar mi boca para determe.

-No sé que es tan gracioso, Felipe- dijo enojada

Cree que me estoy burlando de sus celos.

-Quién te dijo eso?- pregunte- Melody?

-No exactamente- respondio- lo dijo mientras todas nos cambiábamos para educación física- dijo- no sabes cómo me sentí

Empecé a reir mucho más.

Ella ahora estaba mucho más enojada.

-Mejor no te hubiera dicho nada- dijo- no sé qué es tan gracioso

-No, princesa- dije- es que el día que Zoe vino a mi casa tomándome por sorpresa

-Y que paso?- dijo

-Estaba mal por vos y cuando íbamos a
hacerlo, la llamé por tu nombre y salió
enojadísima- dije- créeme, nunca la había visto así

Ahora la que reía a carjadas era Camila.

Me encanta su risa.

-Encerio?- dijo- es una estúpida

-Ahora que lo recuerdo, ese día yo estaba bastante enojado- dije

-Por?- dijo

-Te vi en el aeropuerto con un chico- respondi- acababa de llegar de California y no fue muy lindo- dije- tenía planeado descansar, pero llegó Zoe y pensé: ¿Por qué no?- suspiré cansado- aunque el intento de olvidarte
no funcionó