Maldito, así se atrevían a decir que estaba su libro ya que todo aquel que se deleitaba en sus páginas terminaba sufriendo. Comprobó que con el paso de los años y desde su como lugar como fantasma, sus lectores padecían los horrores al llegar todos al clímax de la obra. Aunque era por pura casualidad que en ese instante, él proyectara toda su energía hacia ellos.
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Microrrelatos II
RandomEn este recopilatorio de historias volcaré emociones. Seguiré experimentado con las palabras, continuaré buscando el silencio entre los gritos del día a día.