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El día se había pasado muy lento, Wonwoo ni siquiera tuvo la oportunidad de ver a Mingyu en el receso, ya que la profesora Lee les había dejado una practica de laboratorio y no terminó a tiempo, como consecuencia fue de los últimos alumnos en salir.

Aun así, el +A que resaltaba con color rojo en la hoja donde trabajo, lo hizo sentirse orgulloso.

Pasó directamente a su casillero para poder guardar sus cosas, mientras tarareaba una canción.

—¿Qué pasó con el llamativo Jeon Wonwoo? —la voz de Seungcheol sonó a espaldas del rubio.

—Su despertador no sonó y se quedó en casa —respondió sin siquiera voltear a verlo.

—Aún así, siempre te vez muy bien —Wonwoo volteó a verlo con molestia.

¿No era que tenía novio?

—Te encontré, ¿nos vamos? —escuchó la voz del azabache evitando que Wonwoo le contestara a Seungcheol.

—Claro.

Ambos caminaron hacía el estacionamiento, no sin antes ver como Mingyu y Seungcheol se daban miradas de pocos amigos.

—Gracias —suspiró Wonwoo— Me salvaste.

—¿Te salvé? —Mingyu entrecerró sus ojos— Si tan solo hace unas semanas eran la pareja perfecta. —comentó con burla.

—Era pura fachada —dijo— El de un día a otro me dejo por Jeonghan—mentiría si dijera que no le dolía— Pero bueno... —contestó como si quisiera cortar el tema y se dirigió hacía su auto— nos vemos luego —Wonwoo dió apenas dos pasos cuando escucho nuevamente la voz del azabache.

—¡Hey! Dijiste que terminaríamos hoy el trabajo de física.

—¿Cuándo? —no recordaba haberle dicho algo así.

—Hoy —dio unos cuantos pasos hacia Wonwoo— En la mañana, en el jardín.

Con que eso era lo que no había entendido.

Era compresible. Aún estaba en shock por la confesión de la mañana.

—Wonwoo, no me hagas arrepentirme de lo que te dije.

—No —contestó rápido— Tu eres el culpable, pasas de prácticamente gritarme "te odio" en la cara a "me agradas" —imitó a la perfección la voz de Mingyu— ¡Estaba impactado!

—No te dije "me agradas" te dije que comenzabas a agradarme —aclaró— Todavía no te la creas —se burló— Entonces... ¿si lo terminaremos hoy? —regresó al tema principal.

—Está bien —asintió— Pero tendrá que ser en mi casa.

—¿Sigues molesto? O ¿Por qué no quieres en mi casa? —metió sus manos en sus bolsillos.

—No, no es eso —nada sería mejor que permanecer más tiempo fuera de su casa— Pero mi madre está en ese plan que finge preocuparse por mí.

—¿Finge?

—Así es —suspiro mientras le restaba importancia— En fin... ¿en mi casa?

—Te sigo —dijo sacando sus llaves para después caminar hacia su motocicleta.

Cuando ambos llegaron a la residencia del rubio, Wonwoo suspiró, era imposible no comparar ambas casas, la de Mingyu era calidez, paz.

La suya era... Fría y vacía.

—Linda casa —dijo Mingyu mientras recorría el lugar con la mirada.

—Gracias.

Comenzaron con la guía, ya era poco lo que faltaba.

—Casi toda la semana estuviste en mi casa, ¿tus padres no te dicen nada? —pregunto el azabache curioso.

—Seguramente mi padre si me regañaría —sonrió con melancolía— Pero mi mamá no — subió los pies al sillón— Ni siquiera se da cuenta si estoy aquí o no.

—¿Y tu padre? —dijo sin entender muy bien.

—El falleció cuando yo tenía nueve años —explico— Y desde entonces mi madre se encarga de la empresa que ambos tenían, así que por eso ésta muy ocupada en su trabajo.

—¿Won? —se escuchó la voz de la madre de Wonwoo entrando a la casa.

—¡En la sala!

—¿Tú sabes de quien es la motocicleta que está afuera? —entró a la sala, entonces descubrió quien era el propietario de dicho vehículo.

Mingyu se pusó de pie en cuanto la vió entrar al cuarto.

—Kim Mingyu, un gusto —dijo educadamente haciendo una reverencia.

Ella lo miro de pies a cabeza, Wonwoo rogaba por dentro que no hiciera o dijera nada descortés.

—Jeon Minji—se dió la vuelta saliendo de la sala ignorando por completo la reverencia de Mingyu.

Mingyu sonrió tímido mientras rascaba su nuca —Bueno creo que será mejor que me vaya.

—No —dijo Wonwoo serio— quédate, así es ella siempre —le explicó.

—Ya veo a quien saliste —comentó para alivianar un poco la tensión que se sentía en el aire.

—¡Oye!

Mingyu solo sonrió— Ya es tarde y no puedo dejar mucho tiempo solo a Soon con los niños —pasó su mano por su cabello— Sabes... el viernes se quedaron muy tristes porque te fuiste sin despedirte de ellos.

—¿De verdad? —suspiró con felicidad— ¡Diles que mañana pasaré por ellos!

—No lo creo —negó con la cabeza.

—Min, no te estoy pidiendo permiso —habló suavemente— Te estoy diciendo que pasaré por ellos.

•••

—¿Quién es él? —¿Su madre tenía el atrevimiento de preguntarle sobre Mingyu después de cómo lo trató?— ¡Te estoy hablando! —dijo al ver que Wonwoo pasaba de largo mientras la ignoraba

—No creo que te importe.

—¡No me agrada! —le dió una mirada de enfado.

—¡No me interesa!

—Te la has pasado con el ¿cierto? —Estaba en lo correcto— No sé porque sales con él, ¿Por qué terminaste con Seungcheol?

Tres semanas, tres semanas que había terminado con él, y recién se interesaba.

—Mamá —Wonwoo cerro sus ojos tratando de contener su enojo— ¿Por qué no dejas de fingir que te intereso y sigues con tus cosas?

—Jeon Wonwoo, ¡Regresa! —ordenó cuando lo vió subir las escaleras.

—¿Para qué? Siempre que intentas arreglar las cosas terminamos peor, así que mejor así déjalo. —nuevamente ignoró sus llamados y subió a su habitación.

Ya estaba harto.

me, myself and i | MeanieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora