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Mingyu dobló nuevamente la carta en tres para después prácticamente desintegrarla, rompiéndola en cientos de pedazos. Se puso de pie con una rabia incontenible. No sabía qué hacer, no sabía si gritar, no sabía si creerle o si enojarse consigo mismo.

Mingyu apretó los puños con furia, sintiendo cómo el dolor punzante se enroscaba en su pecho.

La traición de Wonwoo cortaba como un cuchillo afilado. Cada palabra de la carta resonaba en su mente como un eco doloroso, alimentando la furia que ardía dentro de él.

La desesperación lo inundaba, sintiendo que el mundo se desmoronaba a su alrededor mientras luchaba por encontrar una salida a este torbellino de emociones. La mesa de centro se convirtió en su víctima, recibiendo el impacto de su ira desenfrenada, pero incluso la destrucción material no podía aliviar la tormenta emocional que lo consumía. ¿Cómo podría sanar su corazón roto cuando la traición de alguien en quien confiaba ciegamente lo había dejado tan vulnerable y perdido?

•••

Wonwoo llegó al aeropuerto, le pagó al taxi y bajó sus pesadas maletas.

Caminó hacia el mostrador, puso sus maletas en la báscula, entregó su pasaporte y boleto, al momento le entregaron su pase de abordar.

—Puerta A-3 con destino a Japón —indicó el joven frente al mostrador.

—Gracias —Wonwoo trató de que su voz no se escuchara entrecortada.

—¿Todo bien joven? —preguntó y Wonwoo rápidamente limpió la lagrima que se había deslizado por su mejilla, ya que ni siquiera los grandes lentes oscuros habían logrado detenerla.

—Si, todo bien —dijo tomando con rapidez su pase y limpiando con brusquedad la lagrima.

Caminó rápidamente, aún faltaba media hora para poder abordar, se sentó mirando hacia el gran ventanal y no pudo evitarlo, comenzó a llorar con nostalgia, puso su bolsa en sus piernas y oculto su rostro en estas.

¿Por qué lo había arruinado así?

¿Por qué había jugado con Mingyu?

No solo se sentía la peor persona del universo. Era la peor persona.

Mingyu jamás se lo perdonaría.

Seguramente la carta había terminado en un basurero.

Pero se dijo que era lo mejor, se iría lejos, tanto como Mingyu y él empezarían de cero.

El tiempo de espera paso volando, el joven que lo atendió indico que era momento para empezar a abordar, Wonwoo tomó sus cosas y se formó, la fila se movía lentamente ya que revisaban pasaporte y el pase a la vez a los pasajeros.

Wonwoo quería subir ya.

Solo quedaban dos personas delante de Wonwoo, inhaló profundamente y avanzó un paso ya que uno de los de adelante ya había pasado.

—¿Te vas a ir? ¿Así de simple? —escuchó la voz que tanto había extrañado, su pulso comenzó a acelerarse.

Era Mingyu.

Se dió la vuelta y ahí estaba él, las gotas de sudor resbalaban por su mejilla, su pecho se expandía y contraía con rapidez dado a la agitación.

—Mingyu...—Wonwoo se sacó los lentes y una vez más comenzó a llorar.

—No me contestaste —dijo duramente— ¿Así solucionaras las cosas? —Wonwoo miró hacia abajo avergonzado— Llevo veinte minutos corriendo de un lado a otro tratando de encontrarte y ¿Crees que te dejaría ir así tan fácil? —Wonwoo dejó caer sus maletas al piso para correr hacia él, Mingyu lo recibió entre sus brazos.

—Jamás quise jugar así contigo, créeme cuando te digo que estoy arrepentido, y que de verdad te amo, por favor Mingyu perdóname, perdóname —Wonwoo repitió esas dos últimas palabras mientras llenaba la camisa del azabache con sus lágrimas.

Mingyu tomo la barbilla de Wonwoo y lo hizo voltear a verlo, sonrió y emitió un "sh" tenía la respiración acelerada, creía que nunca más volvería a estar en aquella situación, estaba delante de la persona que amaba a punto de besarlo, rosó levemente los labios del rubio, eran tan suaves como recordaba, con ambas manos tomo los cachetes del menor y finalmente los labios de ambos se tocaron con timidez, el corazón de ambos martilleaba en su pecho, los dedos del rubio se aferraron a la camisa de Mingyu con miedo a perderlo de nuevo.

—Te amo Kim Mingyu, te amo demasiado.

—Te amo Jeon Wonwoo.

Wonwoo se sentía tan avergonzado, sentía que iba a llorar de nuevo, pero a la vez estaba muy feliz de que Mingyu había admitido sus sentimientos hacía él sin miedo, el rubio por fin miro a Mingyu y lo abrazo con mucha fuerza.

Mingyu observó al rubio y se centro en sus bonitos ojos, recordó lo mucho que lo amaba y lo mucho que le costaría alejarse de Wonwoo—. Vamos a casa cariño.

•••

Hasta aquí la primera temporada amigos, nos leemos pronto.🩵

allinwonu

me, myself and i | MeanieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora