32

24 6 0
                                    



No sabe cuánto tiempo lleva ahí dándole vuelo a su imaginación, pero oye un auto arrancar y mira afuera, el castaño rojizo se despide de alguien yendo a su auto — ¿Ya te ibas? — le sonríe

Él le abre la puerta — Casi — responde relajado

— Debo ir a la fiesta de Rachel ¿Me acompañas? — insiste el menor lanzando su mochila al asiento trasero

— Si, traigo mi vestuario — él se siente raro, porque sonó muy emocionado

Nigel sonríe ruborizado, mirando por la ventana — Ah claro — ríe suavemente, y eso le relaja mucho .


Conduce con la música a buen volumen, dejando atrás los suburbios y encaminándose al Este de la ciudad, va tranquilo incluso satisfecho de disfrutar esa cómoda compañía, aunque el castaño rojizo va en silencio, mirándolo algo fijo y casi abstraído

Chad duda al punto que se cuestiona cuánto han estado así — ¿Qué? — pregunta nervioso

— Nunca harían un póster de ti así — contesta el menor, pero no es su tono bromista o su expresión relajada — Es una pena — sino un tono más pensativo

— ¿Para qué quieres un póster? Si tienes al real — bromea Chad, tratando de alegrar el ambiente, aunque el chico solo mira por la ventana

— Para cerca del parque — pide Uno con un tono muy tenue

Él busca un buen lugar, notando que aun cuando es algo tarde el sitio está lleno de niños y madres, mirando al menor espera alguna explicación o algo

Nigel mira la escena, como los niños corren y gritan jugándose bromas o imitando a los personajes de las caricaturas, son solo unos segundos pero el rostro del chico parece iluminarse — Yo conduzco — sonríe volcándose a él, más animado. El mismo rubio se siente revitalizado al verlo alegre de nuevo y asiente a la par que cambian de lugares, son rápidos, sin embargo, el menor no arranca — ¿En serio puedes seguir ayudándonos? ¿No afecta tus entrenamientos? — pregunta apoyándose en el volante, para verle a la cara

— No, yo voy en las mañanas, y realmente no me canso ayudándoles — aclara él rápidamente, no es que esté dejando su equipo, aún no es titular pero sigue esforzándose por conseguirlo

— Ya ¿Pero no daña tu desempeño? — insiste el castaño rojizo, extrañamente serio

— Para nada, de hecho, muchos compañeros tienen trabajos de medio tiempo ¿recuerdas? No interfieren, en serio — quiere ser convincente, él realmente lo cree y trata de tomarse esa inquietud de la mejor forma, no obstante — ¿No quieres que venga a ayudarte? — pregunta directo, le ganan sus preocupaciones. En especial por el inexpresivo rostro de Nigel, lo pone muy nervioso, y es difícil saber su mirada bajo los lentes oscuros

— ¿Te estoy metiendo en problemas? — cuestiona Uno, sin cambiar su actitud

— No, nunca ¿Por qué lo dices? — Chad comienza a sentirse asustado, seguro algo ha tenido que ver el entrenador, porque temprano estaba muy diferente

— Vale — exhala el castaño rojizo, suavemente — ¿Crees que debemos seguir la petición del entrenador? — pregunta, tal vez pasando del tema

— No lo sé, todos lo dicen ¿Tú quieres hacerlo? — Chad duda, confundido y extrañado de la nueva dirección que toma la plática, nunca se lo cuestiono y siendo sincero no sabe qué decir

— No lo sé, tu juego viene pronto y no quiero dejarte sin energías — contesta Uno, más bromista

— Claro —sonríe cortamente — creo que estaría bien esperar después de mi partido para intentar algo... — Chad se detiene, notando que el chico lo mira sonriendo — Disculpa— pide inquieto

Everything For YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora