Everything For You

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El almuerzo era muy tranquilo, Wally decidió sentarse al lado de Uno desordenando la mesa y obligando a Kuki a sentarse del otro lado del australiano, como todos los días Andy se había colado a su mesa aunque hoy parecía más silencioso, un poco cohibido y sonrojado

La molestia llegó con Mike, que se acercó con su charola todo sonriente y listo a sentarse cerca de Andy, y delante a Nigel, instante en que el revoltoso rubio se enteró de su existencia — Este no es el lugar para los tarados del football — se levantó impulsivo, siendo despectivo

— No vengo por tu chica, Beetles — el semi rapado desestimó su territorial actitud

— Solo en tus sueños te haría caso — se jacta Wally — Lárgate — le advierte agresivo

— Oblígame Beetles — Mike también se levanta de golpe

Kuki mira todo sin entender porque se gruñen

— ¿Exactamente a qué viniste Mike? es extraño que dejes a tu grupo para venir con nosotros — cuestiona Nigel, en claro apoyo a su amigo

— No te conviene tomar bando, Uno — advierte el sonriente semi rapado, intrigado el castaño rojizo alza su ceja sobre los lentes oscuros — Vamos, en la tarde habrá dos equipos y no querrás estar en el contrario al mío ¿Qué me ofreces para que te elija? — pregunta

El grupo de chicos ríen, desvergonzados, Kuki intenta ser amable pero pronto estalla en risas, Andy es el único que permanece en silencio, teniendo al irritado amateur cerca

— Sé que el entrenador será quien arme los equipos, pero, sin importar de qué lado juguemos pongamos todo nuestro empeño ¿De acuerdo? — sonríe Uno, con obvia condescendencia

— Nigel no te necesita — aclara Wally, orgulloso y petulante le señala al malencarado pelinegro que se vaya

— Así lo quieres ¿Eh?— gresca Mike — Entonces reza para que el entrenador te deje en la banca, por que si sales al campo no importa de qué lado estés, te mandaré a la hospital — amenazante impacta su puño contra la palma de su mano

El comedor entero guarda silencio, Wally casi se sube a la mesa, listo a lanzarse sobre el otro, pero Nigel le sujeta por sobre los hombros levantándose entre risas, divertido de la dramática declaración. Patton le sigue con la mirada suspicaz y los murmullos de las demás mesas no se hacen esperar

— Suena interesante, Shinozaki, pero no te quiero lesionar en una práctica ¿Por qué no te enfrías un poco? — aconseja, seguro y tranquilo

La diferencia de masa muscular y entereza de los chicos resalta a primera vista, todos pueden notarlo al verlos uno frente al otro, Mike sigue siendo delgaducho pese a seguir su dieta riguroso. El incómodo silencio es roto por la mesa del grupo del británico, que retoman su plática y juegos ruidosamente, incluso con Wally apoyado aun sobre la mesa

No obstante, el semi rapado no acepta irse tan fácilmente, come su emparedado con considerable tranquilidad antes de darles la espalda — Esto no se acaba aquí, Uno — maldice entre dientes, alejándose frustrado

— Deberías dejar a esos idiotas — se queja el revoltoso rubio, volviendo a su lugar y mirando agresivamente a Andy — No saben ser agradecidos... — pretende continuar hasta que Kuki lo detiene

— Estaría bien — exhala Nigel al sentarse — Pero lo prometí — concluye con cierta solemnidad que cala en sus amigos, lo miran aceptando su respuesta, aunque también entienden su inconformidad

Wally se deja caer al lado de su amigo, mirándolo revisar algo en el celular, y al notarlo Nigel le abraza afectuoso — Solo un par de juegos más — susurra soplando en su enredado fleco, sonriente, y el revoltoso rubio finge molestarse intentando soltarse, mientras Andy mira todo.