Dos Jutsus Prohibidos

Capitulo 29

Naruto suspiró un poco decepcionado. Con sus habilidades sensoriales no fue muy difícil encontrar un equipo con el que luchar y obtener su pergamino. Sinceramente, para tres aspirantes a chunin, eran patéticamente débiles.

Se encogió de hombros. No era su problema si las aldeas enviaban a genins mediocres al examen. Él mismo reconocía que Konoha había inscrito a varios equipos que no estaban preparados para el ascenso, pero al menos tenían la ventaja de jugar en casa.

Dió una última mirada a los shinobis inconscientes y atados antes de despegar. Ya tenía el pergamino que necesitaba, por lo que se dirigía a donde sentía que estaba la chica Uzumaki. Quería conocerla y este parecía el mejor momento.

Estaba saltando por los árboles cuando sintió una presencia, lo cual hizo que se detuviera y examinara su alrededor. Fuera quien fuera, era hábil. No podía sentir su firma de chacra y fue solo su entrenamiento con Tobirama para casos como ese que pudo notar que lo estaban acechando.

-Sé que estás ahí. Sal - habló con autoridad.

-Ku ku ku. Estoy impresionado de que me hayas notado. No mucha gente puede hacer eso si yo no les dejo.

Una supuesta mujer salió del tronco de un árbol. Tenía el pelo largo y negro, ojos negros, piel pálida y llevaba una banda con el símbolo de la hierba.

-¿Quién eres?, obviamente no eres una genin - le dijo con una mirada intensa.

La supuesta kunoichi de Kusa sonrió con malicia.

-Ku ku ku. ¿Nadie te ha dicho nunca que es de mala educación pedir el nombre de alguien sin antes presentarte?

-Ambos sabemos que sabes quién soy - respondió y se preparó para la batalla.

Fuera quien fuera, era obvio que no tenía buenas intenciones. También sospechaba que era más fuerte que él, pero no por ello iba a caer sin pelear.

-Ku ku ku. Cierto, muy cierto.

Nada más terminar esas palabras se lanzó contra él a alta velocidad. El rubio esquivó en el último momento y le lanzó un kunai un segundo después. Su oponente también esquivó mientras se reía alegremente.

El ojiazul agarró otro kunai con la derecha y se preparó para hacer sellos manuales con la izquierda si fuera necesario. Se alegró de haber aprendido a hacer eso después de ver al usuario de hielo usarlo en su misión en la Ola.

La pelinegra se dió cuenta de lo que estaba haciendo y sonrió aún más. Luego desató su instinto asesino en el chico.

El Uzumaki se tensó un segundo antes de volver a la normalidad. Había tenido que lidiar con el instinto asesino de todos sus maestros. Aunque el de la ojinegra era inmenso, superando el de Kakashi y Tenzo, el de los resucitados era mucho peor, especialmente el de Madara.

-Ku ku ku. Realmente eres único, Naruto kun. Mira que recibir mi instinto asesino de frente y no asustarte ni un poco. Sí, justo lo que buscaba - se relamió los labios.

El jinchuriki tuvo que contener el escalofrío que le subía por la espalda ante esa escena. Era ciertamente inquietante.

-Veamos ahora tus habilidades de combate.

Sin más que decir, lo enfrentó en un combate de taijutsu entrelazado con kunais.

Al ver que su adversario era mucho mejor que él, el heredero Senju comenzó con ninjutsu. Un par de cientos de clones de sombra siempre estaban bien como apoyo.

Se lanzaron técnicas de todos los elementos, etiquetas explosivas y muchas armas arrojadizas. Lo que una vez fue un bosque frondoso, se convirtió en un claro yermo. No es como que a los dos luchadores les importase especialmente eso.