Azul Y Blanco [De La Película Río]. ||RIO 2|| 🤍💙

CAPÍTULO 12: GOLPE DE REALIDAD.

Ella estaba llorando mientras miraba a un blu destrozado, con un mirada oscuridad, sin decirle nada.

Tras lo dicho por perla, blu solo se alejó de ella caminando la puerta abriéndola solo para entrar en el oscuro pasillo dejándola sola en aquella habitación.

Pero con tristeza ella lo siguió, entrando también en la oscuridad de aquel lugar.

Perla siguió asta ver a blu entrar en la habitación donde estaba durmiendo con la princesa, perla se acercó discreta dónde pudo escuchar leves gemidos de tristeza provenientes de blu en el cuarto.

Un llanto ahogado y contenido, que para ella eran como un nudo en su garganta, ella lo avía tratado mal en el pasado, pero oírlo le rompía el corazón. Mas sabiendo que el los amaba con todo su ser.

Armando Se de valor entró dentro viendo a blu secarse las lágrimas con su garra, para voltear y mirar a perla, una mirada rota y vacía, perdiendo esa sonrisas que lo caracteriza además de sentirse el ambiente opresivo y gris.

—Blu?. —Asercandose. Lo siento blu.

—Dime... Bia esta viva?. —

—Ella está bien, esta en el asentamiento.

—¡Llevame con ella!.

—Blu esta a un dia de aquí, no creó que sea una buena idea.

—¿Pedi tu opinión?.

Ajustándose los arneses que tenia puesto, acercarse a ella acomodando la capa que tenía puesta, el nombre de su hija era lo unico que se repetía en su mente.

Sacando desde abajo de una mesa su vieja cangurera, Señal de un pasado del cual se había olvidado, pero tenia mas presente que nunca.

Colocando Se la en la cintura, para girarla a la parte de atrás de su espalda, abriendo la puerta sorprendido a las lechuza de a fuera, viendo los guardias una mirada seria y carente de emisiones. Siguiendo lo de siguiendo lo asta estar en la salida del castillo, dónde una de ellas al ver que se perfilaba para salir, intervino frenando su andar, cuestionando lo.

—Señor blu, ocurrió algo?.

—No pasa nada señorita, tengo que salir.

—Pero señor blu, usted tiene que estar serca de la princesa.

—Escuchen, tengo cosas que hacer, ustedes quédense con ella.

—Pero...

Blu la tomo de la capa violentamente Acercándose asta quedar cara a cara.

—¡No estoy para escuchar tus estupideces!.

Empujándola contra su otro compañero, que la sujetó, ambos miraron a blu sorprendidos por la aptitud que tenía.

Al pensar en lo que hizo blu los miro con vergüenza en sus ojos, ya que ese no era el. El jamás trataría con maldad a quienes son sus amigo en el castillo, pero el nombre de bia seguía resonando en su mente.

—Yo... Lo siento. Díganle a la princesa izel que no tardaré y prometo volver. Perla vamonos.

Siguiendo ellos su caminó ante la mirada de aquellas lechuza que no reconocieron a su compañero.

Al irse, las dos lechuzas no sabian las intenciones del spix, por lo que ambas se dirigieron al salon donde estaban la reina y las princesas.

Donde aún estaban esperando a blu y perla que se avían retirado ase dies minutos.

—Madre, creó que blu y perla no vendría.

—Que extraño, bueno la comida se enfriara, por lo tanto comamos. Dejémoslos disfrutar de su reencuentro.