Más allá de las barreras de sangre | Severitus

Capítulo 1

Los personajes no son de mi propiedad, esta historia se encuentra en AO3 por SnapeIsMySpiritQuill

Punto de vista de Harry

Harry conocía la sensación de terror. Lo seguía a todas partes, esperando mostrar su horrible rostro. Sin embargo, en ese momento, lo sintió como nunca antes.

Harry estaba de pie en la puerta del 4 de Privet Drive con Fudge, el Ministro de Magia. Había esperado que su tío Vernon irrumpiera en la puerta gritando y chillando sobre hacer estallar a su hermana, pero la casa estaba en completo silencio.

"Bueno, señor Potter, parece que se han ido. Supongo que a su edad podrá quedarse en casa y cuidarse hasta que regresen" dijo Fudge levantando una ceja mientras miraba a Harry. Harry le había rogado al Ministro que lo dejara quedarse en el Caldero Chorreante hasta el nuevo semestre cuando lo encontró, sin embargo, el Ministro no escuchó nada de eso.

Fudge le dijo con firmeza que tenía que volver a casa y terminar el verano con su tía y su tío. Harry incluso le dijo que lo iban a golpear y encerrar si regresaba. Fudge lo miró a los ojos y le dijo "De verdad, señor Potter, podría ser necesaria una mano dura si cree que andar por las calles en mitad de la noche es aceptable".

Sabiendo que no había esperanza de cambiar de opinión, Harry respondió "Sí, señor". Pensó que tal vez podría simplemente irse nuevamente antes de que sus familiares regresaran; podría esconderse hasta que comenzaran las clases, pero el ministro parecía haber leído su mente.

"Estaré atento para asegurarme que no se mueva, señor Potter. Hay gente peligrosa por ahí y no querrá acabar en sus manos".

Harry quería decirle que en la casa en la que lo obligaron a quedarse vivían las personas más peligrosas. En cambio, apretó la mandíbula y entró en la casa sin decir una palabra más. Al oír que la puerta se cerraba detrás de él, solo pudo suponer que Fudge se había ido.

La casa estaba inquietantemente silenciosa, el sonido de las manecillas del reloj y el zumbido del refrigerador llenaban el espacio silencioso y parecían solo aumentar el pánico que se estaba apoderando rápidamente de Harry. Sabía que, tan pronto como sus parientes regresaran, recibiría la paliza de su vida.

Su tío y su primo solían golpear a Harry cuando usaba magia accidental. Sin embargo, siempre era peor cuando les afectaba personalmente. Una vez se manifestó de una manera que hizo que la piel de su primo se volviera morada y Harry quedó sin poder moverse durante días en su armario sin comida ni agua y con múltiples huesos rotos.

La magia de Harry rara vez afectaba físicamente a otras personas, por lo general se mostraba en formas de escapar. Como la vez que de repente se encontró en el techo de la escuela cuando su primo Dudley y sus matones lo perseguían en una "cacería de Harry". O cuando le volvió a crecer el cabello de la noche a la mañana cuando su tía Petunia le hizo un corte de pelo horrible que seguramente habría provocado más acoso escolar.

Cuando Hagrid le dio a Dudley una transformación similar a la de un cerdo, se alegró de no tener que estar cerca de su supuesta familia durante el año escolar porque probablemente no habría salido con vida.

 Tal como probablemente iba a ser esta noche cuando su tío puso sus manos sobre Harry.

 A la espera de que sus familiares regresaran a Privet Drive, Harry estaba sentado en el segundo dormitorio de Dudley. Estaba mirando unas fotos que encontró en el fondo del ático que su tía Petunia le había hecho limpiar a principios de semana. Eran fotos que Harry había estado mirando todos los días desde entonces. Todas eran de su madre, que aparecía joven en las fotos, no tenía más de once o doce años.