capitulo 24

55 3 0
                                    

Daiana en multimedia.

AMAYA:

Andaba por las calles transitadas de España acompañada de Ray, salí a correr para despejarme y más porque no lo hacía desde hace semanas. Como salgo temprano a correr, Vincent seguía durmiendo en su cama.

Me senté en una banca que había encontrado por ahí,Ray hizo lo mismo pero en el suelo,su respiración estaba algo agitada y su lengua estaba afuera.

— sé vé que no estás acostumbrado a correr mucho.

Ladró,como diciendo un "estás en lo correcto".

Tomé agua de una botella que llevé conmigo, serví agua en mi mano y le acerque a Ray, este tomó tranquilamente. Me sequé la mano con el pantalón y,en el momento,me entró una llamada.

— ¿Hola?— hablé.

¿Amaya?— escucho la voz de mi padre.

— papá. Sí,soy yo.— contesté con extrañeza, porqué me llamaría.

—  ¿recuerdas a tu tío Archie?

Mis cejas se fruncieron ligeramente,mis ojos cayeron a mis pies y mis oídos se volvieron sordos. Quedé así por un rato, hasta que las ronca voz de mi padre me devolvió en si.

Amaya ¿sigues ahí?

Carraspeo antes de hablar.

— eh sí, papá,me acuerdo muy bien de él.— alargue la "u" en muy.

— bueno,en dos semanas es sus cumpleaños,y quiere que toda la familia esté ahí.

— quieres que vaya.— me adelanté a hablar.

— ya sé que nunca te agrada,no sé la razón, pero sigue siendo parte de la familia. Sólo te pido que vengas, sólo ese día.

Suspiré.

— está bien, estaré ese día en casa. Nos vemos.

— nos vemos, hija.

Despegue el celular de mi oreja y colgué. Me incorporé de la banca, empecé a caminar con la mente ida en mis pensamientos.

— volvamos a casa,Ray.

Otra vez comencé a correr,con Ray a la par de mí.

....

Abrí la puerta del departamento, entré yo y atrás mío,Ray. Cerré y caminé hacia la cocina,le serví su alimento a mi perro y le hice un sándwich.

— Maya.— me sobresalte cuando escuché la voz de Vincent atrás de mí.

— Vincent — me agarré el pecho —. No me asustes así.

— lo siento,¿Podemos ir a la mansión Jones luego?— sentándose en la silla.

— justo iba para haya — dejándole el desayuno frente a él, que consistía en un huevo, tocino y arroz y con un jugo de naranja —. Iré a bañarme.

Agarré ropa, entré a la ducha y empecé a lavarme el pelo y cuerpo. Al terminar,me vestí; con un jean gris oscuro,una remera de tirantes negra,un buzo negro, medias blancas y mis Convers blancas. Me cepille el cabello y salí del baño.

Vincent ya estaba preparando, tenía puesto una remera blanca,una chaqueta verde oscuro,unos pantalones grises,y sus zapatillas blancas. Agarré la correa de Ray,se la coloqué y salimos del departamento.

El sol me dió directo en los ojos, recordé algo muy pero MUY importante...

No tenía auto.

Y recordemos que vive a las afueras de la ciudad,nos tomaría horas llegar a la mansión. Este es el momento donde me maldigo por no comprar un auto 1 año antes.

AMAYA:El Fénix Donde viven las historias. Descúbrelo ahora