Los días siguientes fueron una completa angustia.
Jungkook estaba obsesionado con encontrar a la fuente de sus dolores de cabeza, dejando a Jimin en la mansión custodiada, mientras Jimin luchaba con sus propios problemas.
Habían sido agonizante sus encuentros en los últimos tres días, pasaban el día completo sin verse y en la noche cuando el mayor llegaba a su hogar solo se dedicaban a hacer el amor sin decir absolutamente nada.
Ambos estaban frustrados, ambos luchaban con demonios diferentes.
Pero Jimin no podía solo quedarse en cama y llorar ¡Por amor a Dios! Tendría un bebé, necesitaba un chequeo médico, necesitaba saber el estado de su embarazo y la lesión en su útero, necesitaba salir de cama una ecografía y decirle al mayor que estaba embarazado de el.
Sin embargo esa mañana tenía algo diferente en particular.
Al levantarse estiró sus manos y se dejó invadir por la luz solar que se colaba por las ventanas, su cuadro seguía ahí en el mismo lugar, mostrando una imagen suya llena de lujuria y erotismo. Dicho cuadro no estaba siendo observado solo por el.
Al sentarse en la cama su mirada se dirigió a aquella oscura con destellos rojizos que lo miraban atentamente.
– ¡Estás aquí! Buenos días amor me alegra que...– Sin embargo al sentir la profundidad de aquellas perlas sobre las suyas detuvo su impulso de saltar hacia el para abrazarlo, simplemente quedó frío ante aquella mirada tan penetrante sobre el.- ¿Qué? ¿Por qué me miras así?
Sentia un nudo en su garganta y las inmensas náuseas matutinas.
Sorbiendo su nariz el mayor tiro el sobre encima de la cama.
– Pensé que le hacías un favor a Lea, tu nombre está en ese maldito papel, pero la duda me estaba comiendo de una manera que no podia explicar, entonces revise tus cosas y encontré esto.- De su bolsillo aquella caja de píldoras anticonceptivas se mostraron frente a el.- No pueden ser de Lea, son tuyas Eunwoo me dió el puto diagnóstico y antes de gritar y reprocharte esto quiero saber ¿Por qué?
En aquel rostro varonil que Jimin tanto amaba, estaba reflejado el dolor de un hombre herido que habia llorado mirando aquel análisis de sangre.
– Se que quizás estés enojado y me lo merezco, pero debes saber que hay un trasfondo en todo esto.
– Adelante, quiero escuchar.- Pero su mandíbula estaba tan presionada que las venas de su cuello resaltaban y sus fulminantes ojos eran como dos cuchillas capaz de atravesar cualquier cosa a su paso.
– No te dije que era un doncel porque lo considere una perdida de tiempo, no puedo dar hijos, según estudios médicos tengo una lesión en el útero.
– Este análisis dice que hay un hijo mío ahí, así que hijos si puedes tener ¡Tu maldita excusa no es nada Jimin!
– No, no entiendes lo que quiero decir, el problema no es que quede embarazado, el problema es que el embarazo dure los nueve meses de gestación Jungkook, ¿Cómo podría ilusionarte con la idea de ser padre cuando no puedo? Pensé en ti, pensé en tus sentimientos y emociones.
– ¡¿Y según tu era mejor ocultarme algo de tal magnitud?!¡Vaya idea!
– Es irónico que te molestes cuando tú también me ocultaste algo muy grave.
– ¡Bien Jimin! Voltea las cosas a tu beneficio, ¿Por qué no me dices lo que realmente quieres decir? Se que ocultas algo, conozco cuando mueves tus ojos así ¡Vamos Jimin!
– ¿Estás muy enojado?
– ¡¿Tu que crees?!
Respirando con calma Jimin gateo hasta el borde de la cama, para estar tan cerca de el como le fuera posible, olvidando su desnudez e ignorando lo agitado que estaba su corazón al ver tan afectado a su hombre.
– Necesito que confíes es mi, necesito que dejes de verme con enojo y te tranquilíces.
– Irónico cuando tú enojado heriste a uno de mis hombres Jimin.
Bien la conversación no estaba tomando ningún rumbo favorable.
Cerrando sus ojos sintió como sus ojos se cristalizaban.
– Tuve un aborto.- El murmuro fue a penas audible, pero necesitaba soltarlo de una vez por todas.
Sin embargo los latidos de Jungkook parecieron detenerse por un segundo al escuchar aquello.
– ¿Qué?
Las nauseas se hacían cada vez más fuertes, abrir sus ojos y ver los contrarios completamente atentos a su rostro llenos de lágrimas, fue un golpe de realidad bastante crudo. Había perdido un bebé de Jungkook y jamás le había dolido tanto como ahora que ambos hablaban de ello.
– Fue... Fue cuando Yoon inauguró el casino.- Su voz se volvió temblorosa mientras Jungkook no dejaba de mirarlo, su enojo se volvió un profundo miedo que no podía explicar.- Tae y yo bebimos mucho alcohol y tuve un accidente en las escaleras, yo... No lo sabía, no sabía que era un Doncel o que estaba embarazado¡Yo no sabía mi condición! Y... Me duele recordar que todo ha sido culpa de mi irresponsabilidad, que si no hubiera cometido imprudencias quizás... Quizás y-y yo no sé si este bebé sobreviva y yo... Lo siento tanto.
Se derrumbo frente a Jungkook, llorando por aquel acontecimiento que ya tenía años pero seguía tocando su corazón como esa vez.
Para Jungkook escuchar aquello fue sentir como si un balde de agua fría cayera sobre su cabeza, mirando a Jimin con la cara entre sus manos llorando desconsolado, pensó en el análisis de sangre.
Estaba embarazado.
El iba a ser papá.
Así que se levantó de aquel sillón y tomó la manta para cubrir la desnudez del menor, terminando por sentarse en la cama quitando las manos de Jimin de su cara.
– Necesitas ir a un médico, esto es arriesgado debí cuidarte todo estos años, merecía saber la verdad porque necesitaba cuidarte de algo como esto, igual estare aquí ¿Bien? Si no se da seguiré estando a tu lado y amándote con mi vida, si se da te seguiré amando y lo amare a el ¿Está bien? Ya no llores, odio que llores
Incluso si estaba enojado no podía solo gritar y hacer llorar a Jimin sabiendo que su estado era delicado, Eunwoo le había sugerido hacerle un chequeo medico al menor.
Y abrazando el cuerpo frágil de su bebé se dió cuenta que no podía solo darle la espalda, iba a ser papá, el iba a ser papá.
"Algún día cuando tengas tu familia entenderás el porque elegiste el camino equivocado y querrás haberme hecho caso cuando te pedí que no siguieras los pasos de tu tío."
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Ninfomanía [KM]
FanfictionEl mal tiene ojos, grades y redondos, un cuerpo atlético y un metro ochenta de altura. Jeon Jungkook con los años ha ganado una fortuna, como también enemigos que buscan ocupar su lugar o eliminarlo definitivamente del camino. Pero lo mas importante...