Mini Historias De Las Leyendas

✨Soy Un Pan De Muerto✨

Es medio día en la ciudad poblana y todo se halla en tranquilidad, al interior de la casona entre los pasillos del inmueble esta el joven Raúl junto a Alebrije y ambos caminan sobre los largos pasillos mientras van conversando junto a que se dirigen al comedor principal.

Raúl: Muchas gracias por ayudarme en el entrenamiento de hoy, no se a donde se habrá ido sebas, pero en fin, fue bueno que me ayudaras al ponerme retos como lanzarme bolas de fuego o al encerrarme en aros junto a estar rodeado de enormes llamas, ya que ante las misiones que tenemos casi a diario nunca se sabe cuando una situación con fuego se presente -viendo a su amigo en lo que guarda su espada al interior de su vaina que cuelga al rededor de una de las presillas de su pantalón-

Alebrije: No hay de que chamaco, me gusta ayudar aunque teodora diga que no hago nada bien, pero tanto entrenar hizo que me diera hambre, vamos a la cocina a ver si hay algo y sino vamos al mercado con doña Martha por unos buenos platos de mole de olla -sonríe mientras se lame ligeramente los labios y frota sus manos de solo imaginar junto a que se saborea dicho alimento-

Raúl: Me parece una buena idea -le guiña el ojo y dando una ligera sonrisa-

Ambos llegaron al comedor y antes de irse directo a la cocina se detuvieron debido a que había una pieza de pan de muerto sobre la mesa.

Alebrije: ¡¿Ah caray?! -ve con cierto asombro el pan sobre la mesa- ¡Alguien dejo este rico pan de muerto! -sus ojos brillan de solo verlo-

Raúl: De seguro el que lo dejo ya no lo quiso, así que si quieres cometelo, yo veré que hay en la cocina -le da unas cuantas palmadas en la espalda en señal de que puede comerse el pan con completa confianza-

Alebrije: ¡Pos ya rugiste jefe! -rápidamente toma el pan con una de sus manos y nuevamente se lame los labios de solo verlo-

En el momento que Alebrije estaba por encajar la primera mordida se escucho a alguien gritar "¡No, Alebrije!" "¡Soy yo, sebastián!".

Alebrije: ¡¡AAAH!! -grita aterrado, deja caer el pan de muerto sobre la mesa y retrocede un poco-

Raúl: ¡¿Acaso el pan hablo?! -expresa miedo en su voz como también en su rostro junto a que toma el mango de su espada por si es necesario usarla-

El pan se sacude ligeramente y nuevamente se escucha una voz al momento que se mueve mientras dice lo siguiente "¡Amigos, soy yo, Sebastián! "¡Me convirtieron en un pan de muerto!".

Alebrije y Raúl: ¡¿Sebas?! -su miedo desaparece y ahora estan incrédulos ante lo que ven-

Sebastián: Si, ya se los dije dos veces en este rato -comenta enojado-

Raúl y Alebrije: -se miran confundidos y demostrando asombro como al igual confusión en sus caras-

Raúl: -medita unos segundos, después suspira pesadamente y mira fijamente a su amigo pan- Ok, primera pregunta...¿Podemos comerte?

Sebastián: ¡No! ¡Ninguno de los dos puede comerme porque si lo hacen moriré! 

Raúl: De acuerdo...-dice disgustado- segunda pregunta, ¡¿Por qué eres un pan de muerto?!

Sebastián: Bueno...hmmm...tal vez hice enojar a diana jeje...-habla con un poco de timidez y pena-

Raúl: ¿Otra vez le cantaste la canción de la bruja? -se cruza de brazos y expresa cierta indiferencia-

Sebastián: Hmm...si...-dice avergonzado-

Raúl: Que raro, sigo sin entender porque le disgusta si es una buena canción -tuerce ligeramente los ojos-