Capítulo 5: La Guía de Supervivencia de un Malfoy

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Ya han pasado dos días del incidente y Draco no había vuelto a ver al chico. Según tenía entendido, estaba durmiendo, y cada vez que despertaba, se volvía a desmayar.

Aja, al parecer le gustaba desmayarse.

Draco estaba pasando cerca de la cabaña de Afrodita para ver a Silena cuando fue interceptado por los gemelos Stoll: Travis y Connor.

Recuerda perfectamente la broma de ayer en la mañana, esos malditos le pintaron la cara y el pelo de color rojizo.

Así es. Rojo.

NO QUERÍA SER UN WEASLEY.
QUE HASCO.

Desde ese acontecimiento, Draco ha odiado a los gemelos, y estos solo se reían de su desgracia. Tuvo que ir a la enfermería para que le dieran algo, donde conoció a William Solace, uno de los sanadores del campamento.

Volviendo al presente, Draco aprieta los dientes y los mira con enojo. "Largo, idiotas. Solo estoy buscando a Silena." Dice de mal humor, como odia a estos chicos.

"Tranquilo rubio, solo veníamos a saludar. Por cierto, Silena está ocupada enseñando a unos niños." Connor explica.

Draco les da una mirada fulminante y se larga directo a los establos de los pegazos.

De lejos puede ver a una docena de niños de edad escolar y sátiros jugando voleibol. Canoas se deslizaban a través de una laguna.

Draco caminó más rápido, quería ver a Beyond.

Una vez llegado a los establos, pudo divisar a Beyond comiendo algo de heno. Draco se acercó y extendió su mano mostrando una manzana verde.

Porque sí, descubrió que a ella también le gustan. O sí, ella era simplemente perfecta.

El rubio acarició la cabeza de Beyond, era tan linda.

"Este es el establo de los pegazos...." Draco volteó y se encontró con el señor Quirón y el chico de ojos azul con verde.

El chico se quedó mirando a Beyond con sorpresa, como si nunca hubiera visto un pegaso antes. Pero luego notó cómo dirigía su mirada a él. Se sintió algo extraño.

"Draco, qué bueno verte." Dijo Quirón algo sorprendido por encontrarlo en el establo. "Percy, él es Draco Malfoy, es nuevo en el campamento al igual que tú, solo que él llegó unos días antes." Explicó. "Draco, él es Percy Jackson, como sabrás se integró hace poco, le estoy enseñando los alrededores. ¿Vienes a visitar a los pegazos?"

Draco asiente algo arisco. "Sí, señor. Ahora lo iba a buscar para preguntarle si puedo aprender a volar en Beyond." Dice algo duditativo.

Quirón se quedó mirando al chico.  "¿Quieres montar?  ¿Estás seguro?" Draco puede escuchar la duda en su voz.

El chico se encogió de hombros.  "Sí, ¿Por qué no? A Beyond le caigo bien. Además es lo único que me gusta de este campamento de pacotilla." Dijo murmurando lo último.

El señor Quirón frunció el ceño.  "Los pegazos son criaturas mágicas,  no son simples caballos.  No se les monta así como así.  Necesitas un mentor que te enseñe apropiadamente."

"Silena podría enseñarme, señor." Draco sonrió algo incómodo. Luego pudo sentir como Beyond se frotó contra su mano con su suave hocico.

"Hablaré con ella entonces." Concedió Quirón. "Te veo en la reunión de canto de esta noche, Draco. Tengo que seguir con Percy, todavía faltan algunos lugares por mostrarle. Capas ustedes puedan llegar a hacer amigos, también. "  Dijo caminando hacia el campo de tiro de jabalina.

Percy solo lo observó por lo que parecieron horas. Los ojos del chico mostraban tanto que era imposible deducir qué sentía. El chico parecía querer decir algo, pero se arrepintió y se fue detrás de Quirón murmurando un "Nos vemos".

Finalmente Draco suspiró. Miró a Beyond y siguió acariciándola. Recuerda las conversaciones que ha tenido con Regulus, él le había dicho que intentará convivir con los chicos del campamento, que no puede estar aislado y odiando a todos en estos meses que se quedaría. Dice que establecer relaciones siempre es beneficioso. Pero Draco no estaba tan seguro.

Draco se imaginaba a su madre, a su padre, a Regulus, a la mansión...  Se sentía tan lejos de todo eso.  Hasta que la pegaso rechinó pudo salir de su estupor.

Sangre y trueno: La sombra del Olimpo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora