Capítulo 16: Descubriendo una parte de la profecía y nuevas experiencias

179 39 25
                                    

Habían sido los primeros héroes en regresar vivos a la Colina Mestiza desde Luke, así que todo el mundo los trataba como si al fin cayeran en cuenta de que era un Malfoy, dándole el respeto que merecía. Pero no se sintió igual.

Esto es por ser Draco.

No por ser un Malfoy.

Y eso… se sintió bien.

Draco, en su mayor parte, por no decir siempre, pasaba tiempo con Percy, o bien con Annabeth, Grover y Silena.

Extrañaba a Luke; no había podido hablar con él desde que regresó.

También hablaba últimamente con Will y los gemelos Stoll. Aún les tenía cierto resentimiento a los dos últimos, pero ya se había desquitado jugándoles una broma en compañía de Percy. Fue divertido haber volcado su canoa y haber hecho que no pudieran salir del agua en un buen tiempo.

Will y Percy se encargaban de que viera películas; eran geniales, en especial esa donde sale un chico con poderes de araña. Draco se volvió su fan cuando este estuvo del lado de Tony Stark. Había decidido ser Team Iron Man, también había conocido a Loki, el hermano de Thor; su personalidad le recordó a alguien, pero no sabía a quién.

Cuando lo comentó a Percy, Annabeth, Grover, Silena, Will, los gemelos Stoll e incluso todo el campamento lo habían volteado a ver incrédulos. No sabía por qué, pero no le dio importancia.

Es feliz viendo Avengers, hasta que vio Endgame. Percy dice que Draco había estado inconsolable, llorando cada vez que hacían una mención de ello o se acordaba de la nada. Draco lo negaría, pero volvería a llorar.

También estaba pasando un buen tiempo con Silena y Beyond. Beyond había relinchado al solo verlo a él con una manzana verde. La había extrañado; seguía siendo tan magnífica como siempre. El vuelo en ella fue espectacular.

Mientras, con Silena habían estado hablando de la moda muggle; esta le había enseñado su guardarropa; a Draco le había encantado. Ella le había prometido ir una vez juntos de compras por las mejores tiendas. Draco aceptó encantado. También le había mostrado a Taylor Swift, le había hecho una introducción al mundo pop y a los libros de romance adolescente.

Definitivamente amaba a Taylor Swift y amaba a Jack Ross.

Antes habría despreciado cualquier cosa de muggles, pero ahora podía verlos de otra forma.

Quería ver más.

Saber más.

.
.
.

Según la tradición del campamento, tuvieron que usar coronas de laurel en el gran festival organizado en su honor, y después dirigieron una procesión hasta la hoguera, donde debían quemar los sudarios que sus cabañas habían confeccionado en su ausencia.

Annabeth tenía una mortaja de seda gris con lechuzas de plata bordadas.

Como Percy era hijo de Poseidón, no había nadie en su cabaña para hacer su atuendo; la de Ares se había ofrecido voluntaria para hacerlo. A una sábana vieja le habían pintado una cenefa con caras sonrientes con los ojos en cruz, y la palabra “PRINGADO” bien grande en medio.

Draco, que era hijo de Anfitrite, su atuendo fue hecho por la cabaña de Afrodita; tenía un atuendo de plata hermoso con incrustaciones de oro.

Percy disfrutó quemando su atuendo. Al rubio, en comparación, le había encantado el atuendo. Lamentablemente no podía quedárselo, pero Silena le había prometido hacerle otro aún mejor.

Percy había dicho que parecía un ángel y luego se había sonrojado porque al parecer pensó que lo había dicho en su cabeza, mientras los chicos se reían de ellos, ya que Draco se había ahogado con su propia saliva.

Sangre y trueno: La sombra del Olimpo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora