La mansión Malfoy pronto se llenó de desesperación e impaciencia. No hace falta ser un genio para averiguarlo, es más que obvio por la rapidez al hablar y los cambios de emoción en los rostros de los tres adultos presentes: angustia, aflicción, inquietud y más.
Draco no sabía de qué hablaban, aunque quisiera escuchar, los adultos pusieron un hechizo para la privacidad.
Él solo quería pensar que era un mal sueño, que era una horrible pesadilla, que ningún monstruo lo quiso asesinar dos veces, que esa sirena solo era producto de su imaginación, pero como siempre, la vida se empeñó en ser una mierda, gritándole en la cara lo jodido que está todo esto.
Draco no podía decirles la falta de respeto que le estaban haciendo ignorándolo, solo le tocaba esperar a que dejaran de "conversar" y luego exigir una explicación para toda esta situación, ya que, al parecer, sus padres y Regulus sabían perfectamente lo que pasaba. Él parecía ser el único ignorante del tema.
Cuando por fin terminaron de hablar, y Draco estaba listo para buscar una explicación, Regulus salió a por la red Flu, siendo seguido de su padre, Lucius."¡Dolores!" llamó a la elfo su madre antes de siquiera terminar de procesar más cosas, la elfa apareció y hizo una reverencia a su madre y a el. "Prepara la mochila expansible para Draco, la que compramos la semana pasada de color azul, mete ropa cómoda, productos de higiene y los libros que Draco selecciona en "Libros para leer", también métele los diarios que regaló Severus por el cumpleaños número 11 de Draco. Te esperaremos en el Ministerio, ahora." Ordenó su madre rápidamente, mientras la elfa desaparecía luego de asentir.
Draco fue llevado por su madre fuera del salón hacia la red Flu, podía sentir como su madre estaba inquieta y sujetaba más fuerte su varita, que nunca dejó su mano luego del enfrentamiento de su padre y Regulus con la criatura.
Se sentía ansioso, no sabía qué esperar. Todo se sentía más pesado y sombrío.
"¿Qué pasa?" Logró preguntar en un susurro nervioso, odiando ese sentimiento de fragilidad.
Su madre solo detuvo sus pasos y suspiró. "Te lo explicaré, pero primero tenemos que ir al Ministerio". Dijo derrotada, para luego coger polvos Flu. "Ministerio de Magia", mencionó para agarrar la mano de Draco y llevarlo con ella.
El Ministerio de Magia tenía un ambiente lleno de movimiento. Pero no pudo detenerse a examinarlo ya que apareció la elfa doméstica y le entregó a su mamá la mochila para luego desaparecer. La mochila se veía de muy buena calidad, fue lo máximo que llegó a apreciar porque su madre se encargó de ponerla en su espalda de manera apresurada.
Draco caminó con sus padres a sus lados, ahora sí observando a los distintos magos y brujas con rostros preocupados o cansados. Este tipo de ambiente asfixiante ponía incómodo a Draco, por lo que decidió mejor mirar los pasillos y corredizos, donde se podía observar distintos objetos mágicos y reliquias, con inscripciones de su procedencia.
A medida que avanzaba se fue perdiendo en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando llegaron a la oficina de viajes mágicos.Pero, ¿quién puede culparlo?
En menos de tres horas estaba desayunando con sus padres, llendo al algo, se le apareció una sirena, es atacado por segunda vez por la misma criatura y ahora está en el Ministerio llevando consigo una mochila.
Todo grita "Mal presentimiento"
Y oh sorpresa
No le gusta la sensación
Siguiendo con lo que estábamos. La familia Malfoy llegó a la oficina de viajes mágicos. Pasando por una puerta que decía "Zona internacional de emergencia" donde se podía apreciar algunos objetos muy bien guardados.
Draco al final notó a la que al parecer era la encargada de la zona, los transportó a un objeto en forma de libro. Draco no era muy fan de estos viajes, pero esta vez no podía hacer nada.
Pronto la familia y la encargada pusieron sus manos en el libro, así que Draco por inercia también la puso. Sintiendo rápido ese característico estirón comenzando a girar.
El traslador los transportó en un instante, todos rápidamente quitaron la mano del objeto. La rapidez del viaje lo hizo sentir aturdido, con ese vacío y ganas de vomitar por el viaje.

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Sangre y trueno: La sombra del Olimpo
Hayran KurguNarcisa Malfoy, con la esperanza de un hijo, hizo un pacto con una antigua fuerza. Draco, su hijo, nació con un destino misterioso. La sangre pura y la magia eran su mundo, pero un poder salvaje se despertaba en él, un llamado a un mundo que no cono...