Groupie love (Kelly Nickels x reader)

Capítulo 16

Desde aquel día, la noticia del inicio de mi relación con Kelly se esparció como flamas entre todo nuestro círculo de amigos.

El amor de Kelly tuvo un impacto bastante positivo en mi vida, a decir verdad, la disfrutaba mucho más compartiendo tantas aventuras junto a él.

Aunque Kelly estaba más ocupado con su banda ya que tenían un sello discográfico ahora, nuestra relación no se veía realmente afectada, podía seguirlo viendo diario después de clases, antes de que fuera a grabar canciones en el estudio. Y algunas veces, cuando terminaba de trabajar, venía a visitarme durante las noches en secreto.

Pasábamos todo el fin de semana juntos cuando lo acompañaba al estudio y nos divertíamos con los chicos de la banda.

Sin embargo, toda la diversión no terminaba de quitar todas las preocupaciones que habían dentro de mi cabeza. Ya tan sólo me quedaba un año para decidir qué carrera universitaria iba a estudiar y yo todavía no tenía ni idea.

Me parecía estar quedándome sin tiempo para comenzar a hacer planes sobre mi vida adulta, tendría que conseguir mi propia casa, mi propio auto y para todo eso tendría que conseguir un trabajo, ¿pero de qué?

Estos pensamientos estaban comenzando a quitarme el sueño por las noches y hoy no era la excepción. Una vez más me encontré dando vueltas sobre mi cama, incapaz de conciliar el sueño en absoluto, estaba especialmente preocupada porque hoy había sido el último día de escuela y mañana se haría el evento de cierre de ciclo.

Vi mi despertador, eran a penas las dos de la mañana, suspiré pesadamente y volví a cerrar los ojos, pero los abrí de golpe gracias al sonido de algo golpeando mi ventana.

Con algo de miedo, me acerqué cuidadosamente a ver de qué se trataba y para mi sorpresa, ahí estaba Kelly con un puño de piedritas entre las manos.

Yo sonreí enormemente y bajé hasta la sala, en donde abrí la puerta del patio trasero y salí para encontrarme con Kelly.

—Mi amor, ¿cómo te fue en el estudio?

—Fue pesado, pero por fin estamos terminando de grabar el álbum, tan sólo quedan cuatro canciones y listo.

—Qué bien, ya veremos qué hacer para celebrar el lanzamiento de tu primer álbum.

—Con que me beses dos horas seguidas estoy feliz. Dijo con una pequeña risa.

—Con mucho gusto lo hago, precioso. Me acerqué a besarlo cariñosamente.

Él me correspondió y comenzamos a besarnos, pero pronto aquellos besos fueron interrumpidos por nuestras propias sonrisas de alegría al vernos el uno al otro.

—¿Qué tal estuvo tu día, princesa? ¿Todo bien?

—Sí, ya acabamos de hacer exámenes.

—¿Entonces? Para que te despertara con tan sólo una piedrita en tu ventana a estas horas debes tener un sueño bastante ligero.

—Bueno, no te voy a mentir, no he tenido el mejor sueño estos días. Admití.

—¿Y eso? ¿Algo te preocupa?

—Sí, pero no es nada grave.

—Amor, sabes que estoy aquí para que me cuentes cualquier cosa que te atormente, nunca será una tontería ni mucho menos una molestia para mí y preferiría escucharte antes de que sufrieras sola. Él tomó mis manos gentilmente.

—Gracias, mi cielo, la verdad últimamente me preocupa mucho mi futuro, ¿sabes? No tengo idea de qué haré con mi vida. Dije con un leve suspiro.

—Princesa, aún queda todo un año para decidir.

—Lo sé, pero un año se pasa volando.

—Bueno, en eso tienes razón, pero no te presiones a decidir, estoy seguro de que podrás encontrar cualquier cosa que te apasione antes del año y si no llegara a ser el caso, no tiene nada de malo tomarse un año más para decidir.

—Tan sólo quisiera dejar de sentirme como una fracasada.

—Aunque pienses que lo eres, la verdad es todo lo contrario, linda, eres capaz de lograr lo que sea que desees para tu futuro, no necesariamente tienes que estudiar una carrera universitaria para ser exitosa, no importa lo que los otros digan.

—¿De verdad lo crees?

—Pero claro, mi amor, además, mientras yo exista, siempre tendrás a alguien que te apoye incondicionalmente. Dijo para después besar mis dos manos suavemente.

Como por arte de magia, sentí como si me hubiera quitado un gran peso del pecho después de recibir ánimos por parte de mi amado Kelly.

Aquella noche, como ya era bastante tarde, preferí que subiera a dormir conmigo en secreto hasta que tuviera que irme, fue la primera noche que dormí realmente bien en semanas.