Groupie love (Kelly Nickels x reader)

Capítulo 8

Una disculpa la tardanza de 8000 años a quien haya estado esperando por la siguiente parte, han sido tiempos extraños para mí, pero ya vamos, con nuevo material para el fanfic, sí señor. 💪

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A la mañana siguiente, desperté gracias a los fuertes latidos de mi corazón, que retumbaban vivazmente dentro de mi pecho. Mi estómago estaba extrañamente revuelto y la euforia recorría por mis venas junto con la sangre que me mantenía viva. En mi mente no se proyectaba nada más que el recuerdo de Kelly, que una noche más no me dejó descansar por la intensa adrenalina.

Sonreí como si acabara de bajarme de un juego mecánico en la feria y me levanté de la cama, más animada que nunca.

—Tenemos tanto en común, no puedo esperar para verlo de nuevo. Dije mientras soñaba despierta con nuestra próxima salida.

—Me alegra que te haya ido muy bien, amiga. Juliet me sonrió felizmente mientras sacaba algunas cosas de su mochila. —Si no, nos lo íbamos a machetear entre todos. Agregó ella.

—Yo todavía me lo quiero rafaguear al puto, no le tengo ni una pizca de confianza después de lo que pasó con la chava esa que lo besó en el bar. Habló Regina preparando los materiales para ir a su taller de artes. —No sé cómo pudiste habernos apartado cuando el idiota ese vino por Carla, Juliet. Regina la miró algo molesta.

—Ah, cierto, sólo nos fuimos con Juli sin hacer nada. Habló Grace recordando el día anterior.

—Debo admitir que fue algo impulsivo de mi parte meterme en la situación, ya que al fin y al cabo, la decisión de irse con él o no era de Carla, pero no pude evitarlo, Kelly vino a la escuela por ella, eso es, pues, impactante.

—Y estuvo bastante bien, Juli, la verdad es que yo estaba nerviosa y no sabía que hacer, pero sí quería ir con él, así que te agradezco mucho por el pequeño empujón. Le sonreí a Juliet intentando que dejara de sentir culpa, a lo que ella me sonrió de vuelta.

—La verdad opino que lo que hizo Juli fue mejor que haber intervenido para alejarla de él, además, si Carla no hubiese querido acompañar a Kelly, se lo hubiera dicho desde un principio. Volvió a hablar Grace, a lo que Juliet y yo asentimos en acuerdo.

—Y de nuevo todos se ponen en contra mía. Regina suspiró un poco frustrada.

—Bueno, pues es que parece que las cosas son diferentes ahora. Dije.

—Para mí que en realidad nada cambió y solo le está haciendo al cuento.

—Pero Regi, no es cualquier cosa que un hombre te vaya a buscar personalmente cuando no le contestas si se supone que no le interesas. Volvió a hablar Grace.

—Los hombres hacen lo que sea con tal de tener sexo.

—Yo creo que ya se hubiera rendido si sólo quisiera eso.

—Yo opino lo mismo, además, no todos son iguales. Habló Juliet.

—A que sí. Renegó Regina.

—A que no.

—¿Qué pasa chicas? ¿No van a ir a taller?

Stevie M entró en la conversación.

—Ya vamos, es que estas chamacas nomás no quieren entender que Kelly es un cabrón hijo de puta. Regruñó Regina, haciendo reír ligeramente a Stevie.

—Ay Regi, la verdad es que a mí tampoco me cae tan bien.

—¿Ven? Por fin alguien que sí piensa.

—Ya lo veremos más adelante, él me dijo que no perdiera la fe. Me reí al acordarme de las bromas que Kelly y yo hicimos el día anterior.

Salí del salón, aún riéndome mientras escuchaba a Regina maldecir a Kelly en más de tres dialectos africanos. De repente, afuera me encontré con Stevie O, quien parecía estar escuchando música con su walkman.

—Stevo. Lo llamé rodeando sus hombros con mi brazo.

—¿Ah? ¿Qué pasa?

Él se quitó los audífonos un poco confundido y volteó a verme, cambiando su expresión a una más relajada.

—¿Qué escuchabas?

—La de "Hysteria".

—Heyy que buen tema, a Kelly también le gusta Def Leppard.

—Ah sí, ¿qué tal tu cita con él?

—Pues no sé si llamarle cita en sí, pero estuvo fabuloso.

—Bieeen ¿Qué hicieron?

—Fuimos a comer helado y nos quedamos platicando de muchas cosas, ahora que recuerdo, también me preguntó si tú me gustabas.

—Eso es raro, la última vez que lo vi me preguntó si tú y yo estábamos saliendo o algo así.

—¿Cómo? ¿Antes de que yo saliera con él?

—Sí, recién me acordé.

—Vaya.

—Yo que creo sí le gustas en realidad como para estar preguntando eso.

Yo sonreí tímidamente ante la suposición de Stevie O, al mismo tiempo emocionada porque ambos teníamos razón, era inusual que Kelly hiciera ese tipo de preguntas.

—¿Tú crees?

—Claro, ¿por qué tanta insistencia en saber si es que nosotros tenemos algo más que una amistad?

—Quizá le gustas tú. Sonreí a punto de estallar en risas.

—Puaj, me uno a su club de haters. Stevie hizo una cara de desagrado y comenzamos a carcajearnos.