Extra: sorpresas

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Un mes después del cumpleaños de los mellizos, Mingi estaba en China compitiendo en los Juegos Asiáticos. Han había protestado y llorado a mares cuando se tuvo que separar del alfa en el aeropuerto.

Conclusión de la situación, el omega había estado tan triste los primeros días que ahora estaba durmiendo en la cama del alfa rodeado de sus feromonas.

-Hola Hannie! - lo saludo Jeontae entrando a la habitación de su primo, donde sabía pasado la noche el omega- cómo te sientes?

-Hola Tannie - dijo medio dormido el omega - dioses al fin dormí una noche entera.

-No estés triste, Mingi va a estar de vuelta pronto - dijo el omega Kim

-Lo sé... te juro que lo sé. Pero igual... me siento tan mal cuando no está cerca mío. Y luego de tantos años. No tener la marca aún es algo que me pesa.

-Oye! Eso... marca... no falta nada para tu cumpleaños!! - dijo emocionado Jeontae

-Siiiii - contestó Han - sabes, solo quiero ser mayor y tener mi celo. Siento que estas malditas inseguridades de mi lobo se van a aplacar con esto. Odio esta parte de ser omega, sabes? Por qué solo otro omega que esté en nuestra posición lo entiende. El otro día un compañero beta de mi clase se reía por qué... estaba llorando... el maldito dijo: después se quejan los omegas cuando les dices que son unas mariquillas lloronas y demandantes.

-Maldito desgraciado!!! Quien fue? - dijo furioso Jeontae

-No importa. De cualquier forma no pudo seguir hablando, apareció un alfa como de dos metros sabe la diosa de dónde y lo tomó de la solapa del uniforme. Dijo: "repite lo que dijiste si tienes bolas" - contó Han ahora entusiasmado con el relato - un nuevo compañero aparentemente. Ozaki algo... lo transfirieron de Japón, aunque por lo que pude escuchar es mitad Japonés y mitad Estadunidense.

-Woooow tienes todos los datos - dijo riendo Jeontae - yo venía a preguntarte si querías que desayunemos juntos y me llevo el chisme completo.

-Si... Bueno, es que estaba jugoso el chismecito - dijo Han levantándose y yendo al baño - voy en cinco minutos.

-Excelente! La competencia de Seojun empieza en quince minutos! - dijo Jeontae.

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Mientras tanto en otro sector de la casa, Misun estaba arrodillado frente al retrete temblando de pies a cabeza. Era el segundo día que luego de desayunar corría al baño a vomitar todo.

-Dioses... - murmuró el omega - no puede ser...

Se suponía que su celo sería en un par de semana... pero las náuseas y vomitos, sumado a el nido mucho más grande que había armado las últimas semana solo lo hacían pensar en una posibilidad.

Cómo era de suponer, su teléfono sonaba en la habitación, evidentemente Eunwoo había sentido lo aterrado que se sentía en ese momento el omega.

Con algo de esfuerzo el omega intentó incorporarse aunque no pudo hacerlo, el cuarto de baño comenzó a dar vueltas. Luego de eso no recordó más nada.

Eunwoo estaba desesperado en la empresa, primero sintió alterado a su omega y luego nada... cómo si hubiera desaparecido.

Llamaba al teléfono de Misun sin lograr que conteste. Desesperado y sin saber que pasaba con su pareja. Llamó a Jimin mientras salía rumbo hacia su casa.

"Hola cielo" contestó Jimin

"Algo pasa con Misun, no sé... lo sentí muy mal y ahora nada" dijo desesperado Eunwoo.

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