Era el día de la fiesta. Todos estaban preocupados en la única tienda de ropa del pueblo. Había mucho alboroto por las calles.
–¿Vas a ir con alguien a la fiesta? –me preguntó Ron–. Nunca es muy tarde para ir.
–La verdad es que prefiero no ir. Creo que exploraré el bosque. –le expliqué–.
–Suena peligroso. Te diría que no vayas, pero sé que irás de todos modos. Prométeme que tendrás cuidado –me pidió–.
–Lo prometo. ¿Y tú irás con alguien? –le pregunté–.
–Con Ethan. Empezamos a llevarnos bien, así que ahora somos amigos –afirmó–.
–Eso sí es un cambio radical. Cuando llegué a Valtor, ustedes no eran muy amigos que digamos. Me alegro de que vayan a divertirse –sonreí–.
–Ni me lo recuerdes.
Me estaba riendo cuando de pronto Noah apareció de la nada.
–Brown, necesito hablar contigo –. Y quiero me mires a los ojos.
No me había dado cuenta pero había desviado mi mirada porque él me parecía espeluznante.
–¿Está todo bien? –le pregunté–.
–Quiero que veas algo en el bosque. Es urgente –me insistió–
–No creo que sea un buena...–empecé antes de ser interrumpida.
–Es algo de tu padre –insinuó–.
Me despedí de Ronny con un abrazo y me fui con Noah. Miraba de frente, con cuidado a cada paso que dábamos.
–Ya llegamos. Lo que necesito que hagas es que pongas tu mano en este árbol –me pidió–.
–No entiendo qué tiene que ver esto con mi papá –dije con confusión–.
–Tu papá era humano. Luego lo convirtieron en vampiro y empezó a comportarte como un verdadero idiota. Eso hasta que conoció a su ahora esposa y se tomó una cura contra el vampirismo.
–Todo eso ya lo sé. ¿Para qué quieres que toque el árbol? –le pregunté–.
–Porque cuando él era humano, tocó este mismo árbol y le dió temporalmente habilidades únicas, que ninguna otra persona tuvo –me respondió–. Eso hasta que se convirtió en vampiro y ya no las tuvo.
Me tomó unos tres segundos continuar la conversación .
–¿Por qué quieres que los obtenga? Sé que te gusta aterrorizar al pueblo. No creo que me ayudes sin esperar nada a cambio –afirmé–.
–Necesito que los obtengas ya que esa es la profecía de Valtor. Aquel que toque el árbol y obtenga alguna habilidad, alcanzará el poder absoluto y se convertirá en el protector del pueblo.
–Siento que hay algo que no me estás diciendo –lo confronté–.
Él se acercó más a mí, sus garras tocando mis manos. Mi corazón latía a mil.
–Tu padre y yo éramos mejores amigos. En esa época yo recién me convertí en un hombre lobo. Estaba fuera de control e hice cosas de las cuales me arrepiento. Lo que pasó es que tu padre obtuvo sus poderes eléctricos, que podían hacer maravillas –me contó de a pocos, se quebraba un poco su voz–.
–¿Y qué pasó? –le pregunté–.
–Usó sus poderes contra mí –dijo antes de hacer una pausa–. Él sabía que tenía problemas para controlar mis instintos, entonces me dividió en dos. El hombre lobo y mi lado bueno.
–¿Entonces Shane? –le pregunté–.
–Somos la misma persona –reveló–. Tu padre quería ayudarme, pero me creó un peor daño. Dejó a Valtor con un monstruo que sólo quiere lastimar a todos.
–Y necesitas que yo tenga poderes para intentar arreglar lo que hizo –deduje–.
–Lo necesito. Sé que lo que te pido es mucho pero...
–Lo haré. Pero nadie sabrá de esto. Al menos no por ahora.
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Valtor
AventurăMía es una chica humana extrovertida que por asuntos familiares termina viviendo en casa de su tío junto con su primo Cole, quienes provienen de un linaje de vampiros. Tendrá que acostumbrarse a vivir con vampiros, hombres lobo, brujas y banshees.