Capítulo 6

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Pov Liam.

Estaba jugando a la play en mi cuarto cuando comencé a oler el olor a comida. ¿Papá estaba cocinando?

Bajé las escaleras y cuando entré a la cocina, lo vi efectivamente cocinando con emoción. Hacía mucho tiempo que no lo veía cocinar con esa emoción, su vida se basaba en trabajar en su compañía y viajar por negocios. La comida me la hago yo obviamente.

-¿Papá?

Se volteó hacia mí con sorpresa.

-Pensé que estabas durmiendo.

-No, estaba jugando. ¿Qué estás haciendo? Pensé que estabas de viaje por trabajo.

-Oh no, cancelé eso -asintió- Hoy tenemos invitados.

-¿En serio? –casi me atraganto con mi propia saliva.

-Mira... He estado viendo a una mujer y hoy viene a cenar con nosotros, trae a su hija también.

La gente no sabe dar noticias con calma, ¿no?

-¿Qué mierdas...? -murmuré impactado -Es una broma ¿verdad? –solté una risa –Que buena broma papá.

-No, llevamos saliendo por cinco meses y nos gustaría vivir juntos así que si hoy le gusta el ambiente se mudarán con nosotros pronto –respondió sin ningún rastro de diversión en su tono.

-Espera, espera -dije intentando asimilar lo que acababa de escuchar- ¿Por qué me cuentas esto cuando están a punto de mudarse con nosotros? ¡¿Qué carajo?!

-Creo que a pesar de mi amor hacia ella, también será algo lindo tener una familia. Tendrás a alguien con quien pasar el rato como una hermana y una madre que te cuidará como si fueras su propio hijo.

-¿Una madre? -repetí las palabras atoradas en mi garganta- No necesito que una mujer cualquiera actúe como mi madre.

-Sé que tu verdadera madre no estuvo ahí para ti, pero Eva podría ser una oportunidad para que sientas ese cariño de nuevo. Ella es una mujer maravillosa.

-Ella no es mi mamá -apreté los puños, intentando mantener la calma- Mi mamá se fue cuando yo nací.

-No estoy tratando de reemplazar a tu madre -dijo suavemente, pero sus palabras solo me hicieron enojar más.

-No se trata de eso, se trata de que me lo has soltado como si no fuera nada. ¿Crees que quiero jugar a la familia feliz con alguien que ni siquiera conozco? ¡¿Dieciocho años después?!

-Por favor, dale una oportunidad.

-Tonterias –musité sin poder creérmelo.

-Yo también quiero que seas feliz. Ya no tienes que hacer esto solo.

No respondí y volví furioso a mi habitación. Cerré la puerta de un portazo, intentando ignorar todo lo que decía. Esto no iba a pasar. No iba a asistir a una cena forzada, fingiendo que todo estaba bien.

Como una hora después, escuché el timbre. Dudé un momento, pero luego supe que mi padre me arrastraría quiera o no, así que me levanté y bajé las escaleras esperando lo peor.

Y lo peor llegó en cuanto vi a Marielle de pie junto a su madre, ella también estaba aterrorizada. Podía verlo en su rostro.

Quién me iba a decir que el último día que la vi fue el viernes en clase y ahora, domingo, la veo en mi casa siendo, probablemente, mi futura hermanastra.

Joder, esto es horrible. Será horrible.

-Oh Marielle –mi papá fue el primero en darse cuenta de la situación- Qué sorpresa.

¿Te odio?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora