COMPAÑIA A (NACIONALES)

Capitulo 10

Narra Giselle

Ir a los nacionales me hacía muchísima ilusión, era algo con lo que llevaba soñando media vida y tenerlo me llenaba de alegría, pero era un sentimiento agridulce porque tendría que bailar en el mismo equipo que mi ex novio y su nueva novia.

No se si ya es oficial, pero se que no tardará en serlo, están colados el uno por el otro y se les nota, en el fondo me alegro por ellos, son buenas personas y merecen ser felices pero por otra parte mi corazón aún no había superado a Daniel.

Y lo cierto es que no me sorprendía, Daniel era técnicamente perfecto y lo perdí por estúpida, si hubiese actuado de otra forma aún seguiríamos juntos, pero hice gala de mis miedo convirtiendo que dejasen de ser ficción y se convirtieran en una muy pero que muy desagradable realidad.

Vi como ella se lanzaba sobre el cuando confirmaron su lugar en el equipo, he visto como está mañana en el ensayo de toma de contacto el le ha dado la mano, había que ser ciego para no darse cuenta y yo intentaba por mí y por el equipo que no me doliera pero era inevitable.

Me fui a la sala de música a practicar para dejar de pensar en Daniel, pero pensé mucho más, a fin de cuentas era el baile lo que nos había unido, me fui a the culture shock la tienda nueva que había en el edificio, vi a West y decidí sentarme con el, si no podía deshacerme del dolor al menos lo compartiría y sabía que a el esto también le estaba doliendo por lo que sentía por Nessa.

Estaba jugando a un juego que parecía raro pero resultó ser extremadamente divertido, me alegro mucho estar con West, pero justo cuando mejor lo estábamos pasando aparecieron en modo tortolitos y yo necesite largarme de allí y West me acompaño, como poseídos por el mismísimo Usain Bolt hicimos dos kilómetros en unos diez minutos, decidimos pasar la tarde juntos en el parque y al despedirnos por un motivo que no conseguía entender le bese.

Había pasado una semana desde aquel momento y desde ese día pasó más tiempo con West y por raro que parezca no resulta incómodo ni extraño, pero tampoco hemos vuelto a besarnos ni hemos planeado citas, solo pasamos demasiado rato juntos en el estudio.

Que me atrayese aunque fuese un poco me sorprendió bastante, bueno era mono y bastante inteligente, pero todo lo contrario a Daniel, en todos los sentidos en los que podían diferenciarse lo hacían .

Y siempre había creído que cuando alguien empezase a gustarme otra vez se parecería tanto a Daniel que sería como si siguiese con el, con West no tendría eso, pero quizás era algo bueno, lo vi en el bar de zumos y decidí preguntarle.

- hola

- hey Giselle¿Que tal?

- estoy bien pero necesito hablar contigo de un tema

- soy todo oídos - al decir aquello empezó a mover las orejas de una forma muy rara

- es sobre el beso, quiero saber si hay más o solo fue eso, un beso sin más

- Giselle a mi me gustaría que hubiese algo más, pero no sé si estamos en las condiciones idóneas, en fin, tu todavía quieres a Daniel, se te nota y yo bueno, no se bien que siento pero se que no me he olvidado de Nessa

Cuando dijo eso me dolió, no quería tener nada personal contra ella pero ya iban dos de dos chicos que me gustaban que se enamoraban de ella, no era justo, ni siquiera debería estar en la compañía A y es la estrella, ¿También tenía que quitarme esto? La conozco desde que era pequeña y nunca le he hecho nada para que ella me haga todo esto.

- West si los dos queremos intentarlo el olvido llegará después

- Giselle, prefiero esperar a que nos hagamos daño, espero que lo puedas entender

Lo entendia, por supuesto, pero no me gustaba ni lo compartía, necesitaba ayuda para olvidar a Daniel y West era el primero que me gustaba un poco desde el desastre, tenía que funcionar, teníamos que buscar y encontrar alguna forma de que saliese bien .

Seguimos ahí un rato, en el silencio absoluto, no era un silencio incómodo, era un simple silencio, nos miramos de reojo varias veces y cuando quise darme cuenta nuestros labios bailaban al compás de una melodía imaginaria.

- tengo que marcharme - dijo West

- no puedo creerme que seas un cobarde

- no lo soy, es simplemente que esto no está bien

- dame un motivo, tu eres soltero, yo soy soltera, te gustó y me gustas no veo el problema

- queremos utilizarnos para olvidar y eso no es justo para ninguno, no niego que tengamos cierta atracción pero no la suficiente para borrar el amor que sentimos por otras personas

-¿Pretendes que nos quedemos esperando a que ellos decidan no estar juntos para estar con nosotros ?

- no he dicho eso Giselle, es solo que me niego a hacerte daño si algo sale mal

- pero yo me pienso esforzar para que salga bien

- también te esforzaste con Daniel y mira, te quiero en mi vida, como amiga te tengo asegurada como novia todo se puede ir al desastre y no me lo perdonaría

- mira West entiendo que sigas enamorado de la niña esa, por lo visto tiene un encanto para los idiotas que no entiendo, pero no me intentes culpar ni responsabilizar a mi porque no te lo pienso tolerar

- esta bien Giselle, es mi culpa, no quiero arriesgarme

- vale lo entiendo, pero al menos aceptame una apuesta

Sabía que le encantaba apostar, sería fácil de esa manera

- normalmente no apuesto con chicas pero venga vamos

- dos meses, si en dos meses no eres mi novio oficial te dejaré en paz para siempre

Esperaba que accediera porque era mi último cartucho y lo que estaba empezando a sentir por el era más fuerte de lo que imaginaba

- está bien pero te advierto que nunca he perdido una apuesta

- siempre hay una primera vez

West no lo sabía pero en dos meses solo pensaría en lo feliz que le hace su novia es decir yo