COMPAÑIA A (NACIONALES)

Capitulo 15

Narra Amanda

Seguramente os estaréis preguntando porque he convencido a Nessa de quedarse si quiero destruir el estudio y es su arma más fuerte, hay dos motivos claros primero tenía que ir poco a poco, hacerlo disimuladamente para que cuando se dieran cuenta no pudieran hacer nada al respecto, el otro motivo era más personal, esa chica me atraía como hacia tiempo que nadie lo hacía, y yo cuando quiero algo lo tengo, ella no será la excepción.

Había logrado que se quedase en the next step y por ende cerca de mi, tendría nueve meses para intentar hacer algo y no pensaba perder ni un solo segundo, cuando llegue al estudio ella estaba en el estudio b preparando el solo que tenía dentro de nuestro trio, antes cada vez que la interrumpía se enfadaba, pero ahora después de un mes para el reproductor y me saluda.

- buenos días Amanda, llegas pronto

- parece que somos dos aunque la verdad dudo hasta que fueses ayer a tu casa

- tienes razón, dormí aquí, el ambiente en casa es insoportable, las rupturas de mis hermanas ha irritado a mi madre y eso parece territorio de guerra

- por si te interesa tengo una cama nido mucho mejor que una colchoneta y el desayuno cinco estrellas no como lo que sirven en el bar

- todavía no he desayunado

- eso es un problema que tenemos que solucionar y por suerte el otro día encontré la cocina del estudio

-¿Hay una cocina aquí?

- hay un montón de cosas, estuve haciendo un tour para familiarizarme

- pues creo que ahora tú conoces más lugares de este lugar que yo

- bueno, pero no tengo la esencia, tengo miedo de no encajar nunca

- no eres una pieza de puzzle Amanda, además ya has hecho lo más difícil una amiga, el resto ya llegarán

- confío en ti, pero no nos despistemos de lo importante tu desayuno, vamos

La cogí de la mano, la tenía muy suave y empezamos a correr por todos los pasillos, fue bastante agradable compartir carreras con ella.

La cocina estaba bien equipada y la nevera y despensa llenas así que teníamos mucho donde escoger

- ¿Que va a querer la princesa?

- tortitas por favor

- está bien, pero vas a ayudarme

Jugamos más de lo que cocinamos y nos manchamos mucho más de lo esperado pero yo estaba disfrutando mucho aquel momento, cuando terminamos me límite a verla comer porque yo había desayunado en casa.

Su cara cambio, su sonrisa se pronunció y yo estaba feliz de haber tenido algo que ver porque haría cualquier cosa por ella, me gustaba muchísimo.

- ¿Que quieres hacer ahora?

- me apetece bastante bailar, podríamos practicar nuestras partes, Daniel tiene revisión y tardará en llegar

- sus deseos son órdenes para mí

Volvimos al estudio b, guardamos su colchoneta para que nadie se diera cuenta de que había dormido allí y nos pusimos a bailar, era bastante cómodo bailar con ella porque era una bailarina estupenda, lo pillaba todo al momento y era capaz de hacer cosas que nadie más sabía hacer.

En nuestro grupo pequeño había un pequeño dúo entre nosotras, en el que el tiempo se convierte en un obstáculo entre ellos y esa era la parte que estábamos ensayando de forma constante, en un punto de la coreografía nos mirábamos fijamente porque teníamos un duelo, ella quería más tiempo y yo no quería dárselo, fue en ese instante en el que no pude soportarlo más y la bese.

Ella se aparto, no parecía disgustada pero si muy sorprendida

-¿Se puede saber que has hecho?

- perdón no quería pero es que me gustas demasiado

-¿Tú eres lesbiana?

- etiquetarse es limitarse, a mí me gustan los buenos bailarines y tú eres la mejor de este lugar, lo he intentado evitar pero no he podido

- lo siento es que yo nunca he visto así a ninguna mujer

- tu nunca has visto así a nadie que no sea Daniel

-¿Tanto se me nota?

- bueno lo suficiente para que lo sepa todo el estudio menos el

- es bastante frustrante que no se haya dado cuenta en todo este tiempo

- Ness lo siento pero no pienso ser tu pañuelo de lágrimas, no es que no quiera es que me dolería demasiado escuchar como te gusta otro

- besas bien, al menos mejor que West

- puedes repetir siempre que quieras

Dio unos pasos hacia mi duditativa y empezó a besarme, estaba disfrutando mucho de ese beso, no se lo estaba robando ni nada por el estilo ella había decidido dármelo.

- esto no está bien- dijo todavía cerca de mi cuerpo

- ¿Si no está bien porque tenemos tantas ganas de repetirlo?

Escuchamos como la puerta se abría y se separó bruscamente, era Daniel, fue como si el mundo se riese de mi, la había tenido un instante pero el llevaba teniéndola años sin darse cuenta.

Fue corriendo a abrazarle, como si se sintiera sucia y necesitará limpiarse con su esencia, el le correspondió y le dio vueltas sobre el, parecían la típica pareja americana en el final de la película.

Pero tenía algo a mi favor, ninguno de los dos se atrevería nunca a declararse y yo podía utilizar eso como ventaja para enamorarla poco a poco.

Cuando volví a fijarme en ellos estaban hablando sobre la revisión de Daniel, una vez más estaba hablando sobre su tobillo, resultaba exasperante, nunca me he lesionado y no me imagino como tiene que ser una lesión como la suya, pero si quería superarla tendría que pasar página y hablando constantemente de ella no era la forma.

Nos pusimos a ensayar el trio, fue duro porque cada vez que hacíamos la parte del duelo me entraban ganas de besarla pero no podía porque Daniel estaba ahí, quería pensar que a ella le pasaba lo mismo pero no tenía forma de saberlo y ahora tenía que ocuparme de dos problemas.

Uno como espantar a Daniel para que dejase de ser un inconveniente entre nosotras y dos como destruir the next step sin hacerle daño a ella y ninguna de las dos cosas parecía fácil.