Heredera de Slytherin ♡ Harry Potter - Draco Malfoy ♡ [2]

17. EL MONSTRUO DE LA CÁMARA

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Durante las vacaciones de Semana Santa, los estudiantes de segundo año en Hogwarts se encontraban ante una nueva responsabilidad: elegir sus materias optativas para el próximo curso. La emoción y la ansiedad llenaban los pasillos del castillo. Entre ellos, Selena se sentía abrumada. Caminaba de un lado a otro en su cuarto, su mente un torbellino de dudas sobre las clases a elegir. Por su parte, Neville estaba rodeado por la avalancha de consejos que le llegaban en cartas de su familia. Los magos y brujas de su clan le daban recomendaciones contradictorias, lo que solo servía para aumentar su confusión.

Mientras ambos se encontraban en la orilla del Lago Negro, intentando coordinar sus elecciones, Selena miraba la lista de materias. Se giró hacia Neville, frunciendo el ceño en un gesto de preocupación.

—¿Es más fácil Aritmancia o Adivinación Antigua? —se preguntó en voz alta, buscando un rayo de luz en medio de su confusión.

Después de un rato de discusión, Selena decidió que lo mejor sería inscribirse en las mismas clases que los demás Slytherin e intento coordinar materias con Neville. Al menos así no se sentiría sola en sus decisiones.

Con un aire de resolución, se despidió de Neville y comenzó a caminar de regreso a los pasillos oscuros de Hogwarts. Sin embargo, una sensación aterradora se apoderó de ella; el obscurial latente en su interior parecía querer liberarse nuevamente. Se detuvo, sintiendo que los pasillos desiertos se cerraban a su alrededor.

Trató de reprimir la energía oscura que luchaba por salir. Era como si estuviera en una batalla desesperada contra un monstruo invisible. El pánico creció en su pecho al darse cuenta de que sus dedos comenzaban a oscurecerse.

—No, no, por favor... —murmuró para sí misma, intentando calmar su mente.

De repente, oyó pasos detrás de ella. Se giró, el corazón latiendo con fuerza, y se encontró con una figura familiar: una niña pelirroja que la miraba con curiosidad. La mirada intensa de la niña hizo que el terror se apoderara de Selena.