𝓜𝓸𝓷 𝓑𝓮𝓪𝓾/𝓖𝓲𝓵𝓫𝓮𝓻𝓽 𝓑𝓵𝔂𝓽𝓱𝓮

•IV•

Los dos días pasaron volando, y ya llegó el día, el primer día de escuela. Estaba muy nerviosa. Me levanté y me preparé una hora antes, no pude dormir por los nervios así que decidí hacer algo productivo.

Me asee y me puse mi vestimenta de hoy, me puse un vestido amarillo con unos zapatos negros, un moño a juego y una media cola.

Bajé a toda prisa encontrándome con el desayuno listo.

—No sabía que ibas a estar despierta tan temprano, quería darte una sorpresa —Dijo mi abuela con un tono de sorpresa
—Es que no pude dormir casi anoche y decidí hacer algo productivo —Dije con orgullo mientras me servía mi desayuno. —Sabes, creo que todo irá bien —Dije mientras llevaba un pedazo de huevo a mi boca.

—Obvio que todo saldrá bien mi pequeña —Dijo mi abuela con una sonrisa mientras se sentaba a mi lado.

—Bonjour—Escuché a mi padre decir mientras bajaba las escaleras.

Después de esa pelea no hemos hablado del tema, la verdad estoy muy molesta porque hace que me vaya de donde me siento feliz para el quedarse.

—Bonjour— Dije en un tono cortante.

—¿Emocionada por tu primer día de escuela?—Preguntó mi padre, ¿Acaso olvidó que estaba molesta con el? —Asentí y seguí comiendo mi desayuno.

Cuando terminé de desayunar me levanté para encontrar mi canasta llena de frutas y leche, sonreí hacia mi abuela quien me la devolvió. Puse mis cuadernos y una pluma.

—Au revoir familia —Dije mientras salía de la casa.

Mi abuela me había explicado el camino y soy muy buena con las direcciones así que dudo mucho que me vaya a perder, estaba admirando el paise cuando sentí a una persona detrás.

Voltee y encontré a la pelirroja, se veía un poco nerviosa.

—Hola— Dije con una sonrisa.
—Hola, ¿Eres nueva también? ¿Estás nerviosa? Aunque no creo que puedas estar nerviosa eres muy bonita para estar nerviosa de algo, no como yo que soy fea.
—Umm —Dije incómoda ¿Por qué actuaba así?
—Soy Anne, Anne Shirley-Cuthberth —Dijo la pelirroja mientras me daba su mano.
—Soy Adelaide, Adelaide Beaumont —Dije mientras aceptaba su mano. Un brillo en los ojos de la muchacha apareció.
—¿Eres francesa? —Dijo a lo cual yo asentí —Nunca había conocido a una chica francesa y tan bonita, ¡Ese apellido me parece de lo más excitante! —Dijo dando saltitos, me pareció tierno por lo cual solté una pequeña risita.
—Es muy romántico ¿No lo crees? Los franceses saben de romance—Dijo la pelirroja, sonaba segura.

Mientras caminábamos hablábamos sobre nuestras inquietudes y por fin apareció la escuela. Era muy fea comparada a mi escuela de Paris, era muy chiquita pero tenía unas vistas impresionantes.

—Anne —Dije llamando la atención de la chica —¿Estás lista? —Dije un poco nerviosa.
—¿Lista? Estoy extasiada por conocer gente nueva ¿Tú no? —Dijo mientras nos paramos frente de la puerta.