CAPÍTULO 34

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Periodo de celo IV: Palabras maliciosas que confunden a las personas

Cuando Chu Ling despertó y se fijó en el anillo que llevaba en el dedo izquierdo. Se quedó inmóvil un momento y pensó: Las palabras maliciosas que oí ayer no fueron un sueño. ¿Así que este es el significado de la confesión?

Chu Ling pensó un momento y volvió a sonrojarse.

Salvo por algunos moretones en zonas que no se podían mencionar, no sentía ninguna molestia en su cuerpo. Se duchó rápidamente y salió de la habitación.

Han Gu ya había preparado el desayuno y estaba... bueno, lleno de comida proteica.

La cara de Chu Ling se puso incontrolablemente roja de nuevo, y pensó de forma lasciva que ya había comido mucho.

Han Gu no tuvo ninguna reacción especial. Sólo le echó un vistazo al anillo en la mano de Chu Ling y, tras confirmar que no se lo había quitado, lo llamó para que comiera.

Después del muy intenso ejercicio de la noche anterior, inesperadamente ambos volvieron a su rutina.

El período de celo de Chu Ling terminaría dentro de tres días. Ahora apenas era el segundo día, y si realmente planeaba tener un hijo, para mejorar la tasa de fertilidad, el omega debía permitir que su alfa volviera a entrar en su cavidad reproductiva cada vez que hacían el amor. Chu Ling no quería que pasara nada aún, pero en cuanto pensó en ello, no pudo parar sus pensamientos y el calor de su rostro no disminuyó.

Han Gu se dio cuenta de que Chu Ling estaba particularmente ido esta mañana y adivinó que quizás era porque estaba pensando en algo. Decidió hablar para decirle: "Cuando termine tu periodo de celo, pronto llegará el Año Nuevo Chino...".

"¿Eh?". Chu Ling levantó la vista.

Han Gu se acercó a él y dijo: "Después del Año Nuevo Chino, nos casaremos".

Chu Ling se quedó atónito un rato, pero no contestó.

"¿No estás dispuesto?".

"No...".

Chu Ling sabía que Han Gu no era tímido, pero no esperaba que fuera tan directo, como para dejarlo sin palabras. Más importante aún, no quería rechazarlo en absoluto, pero probablemente por su este estilo de hablar decisivo y sin reservas, fue que se sintió demasiado conmovido.

Han Gu dijo con naturalidad: "Después de tener un hijo, necesitarás una identidad formal".

Aunque Chu Ling sabía que Han Gu había dicho aquello de esa forma por su propio bien, era notorio que estaba actuando. Es así como no pudo evitar pensar que el significado escondido de esa frase era: No fallaré, esta vez de seguro haré que quedes embarazado. ¡Definitivamente te dejaré embarazado!

Chu Ling se preguntó seriamente si la razón de haber pensado así era porque había visto demasiadas telenovelas tontas, lo que lo llevó a tener la ilusión de estar en una novela que tenía como protagonista a un CEO dominante. Aunque desconocía el nivel de confianza de Han Gu, sabía que su alfa quería tener hijos. Esa idea hizo que su cara se sonrojara como una manzana, y cuanto más pensaba en ello, más se atrevía a no mirar directamente a la otra persona.

"Por supuesto, lo más importante es que te amo".

Ese golpe directo hizo que Chu Ling se rindiera por completo. Aunque era propenso a ser tímido, tampoco tenía una personalidad engreída. Se rio entre dientes y dijo: "Yo también, yo también te amo".

Han Gu sonrió y dijo: "Lo sé".

Chu Ling miró el anillo y preguntó: "¿Preparaste esto desde hace mucho tiempo?".

TMPUAQNEMN (Finalizado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora