Entre Dinastías

Capítulo 7

Alyssa camina hacia la oficina, el cielo nublado refleja su estado mental. Mientras ajusta su abrigo, su teléfono vibra con una notificación. El nombre de su investigador privado parpadea en la pantalla. Sabe que esta llamada podría marcar un antes y un después en su investigación.

Al contestar, la voz grave y precisa de su investigador suena al otro lado:

—Encontré a Megan—Dice confiado

Alyssa no puede evitar alegrarse de escuchar la noticia

—Contactala, pídele información sobre Robert y si es necesario dale una compensación économica—Le pide la chica

—En nuestras anteriores colaboraciones siempre eres tú la que habla con los involucrados—Menciona tajantemente

—Te pagaré más de lo necesario si lo haces, en este momento no puedo arriesgarme

Alyssa cuelga el teléfono, el eco de la llamada aún vibrando en sus pensamientos. "Encontraron a Megan", repite mentalmente mientras sube los escalones hacia el edificio. La revelación debería aliviarla, pero en su interior siente una mezcla de alivio y temor. ¿Qué clase de información podría tener Megan? ¿Estaría dispuesta a compartirla, y a qué costo? Sabía que ofrecerle una compensación económica era la única manera de abrir esa puerta, pero eso no hacía más fácil la situación.

Empuja la puerta de cristal y entra al lobby de la oficina. La familiaridad del lugar le ofrece un respiro, un refugio temporal en medio del caos que es su vida en ese momento. Cruza el pasillo hacia la oficina de Theon, donde él ya está sumergido en sus propios asuntos. No levantó la vista cuando ella entra; la tensión entre ellos era palpable desde aquella silenciosa despedida en el aeropuerto.

—Tu café —dice Alyssa, con una sonrisa medida mientras le deja el vaso en su escritorio. Theon la mira un segundo, asintiendo brevemente, antes de volver a fijar la vista en su computadora.

Ella se sienta en su propia estación, a solo unos metros de distancia, y abre su agenda digital. Hay múltiples reuniones, presentaciones y tareas que la esperan, pero sus pensamientos siguen enredados en la conversación que acaba de tener. Revisar los compromisos del día es casi una acción automática mientras sus ojos escanean la pantalla. En el fondo, solo puede pensar en Megan, en la llamada que vendría más tarde, y en la información que podría cambiar el curso de su investigación.

El aire en la oficina es denso, y el silencio entre ella y Theon solo parece acrecentar la distancia emocional que los separa.

—¿Tienes listo todo lo referente a la reubicación de especies del terreno de Edgewood? —Le pregunta finalmente

—Así es, ya tengo todo listo con las ONGS para la recolección y traslado—Responde Alyssa un poco incomoda por la creciente tensión

—Contacta a los medios para dar una rueda de prensa y anunciarlo—Le pide sin si quiera mirarle a los ojos

Alyssa asiente, sintiendo la incomodidad aumentar. Se obliga a apartar sus pensamientos sobre Megan y enfocar su mente en lo inmediato. Toma su teléfono y comienza a redactar correos para coordinar la rueda de prensa que Theon le ha pedido. Sin embargo, la frialdad en el trato de Theon, la falta de contacto visual, es como un recordatorio constante de la grieta que se ha abierto entre ambos.

Las palabras de su investigador privado vuelven a su mente, como un eco incesante. Megan, la pieza que podría hacer tambalear a Robert Pritzker, a su propia familia. ¿Cómo afectaría esto a Theon? Sacude la cabeza, tratando de centrarse en el presente, pero sabe que es imposible evitar esa pregunta por mucho más tiempo.

De repente, el teléfono de la oficina suena, interrumpiendo sus pensamientos. La línea directa de Theon. Él levanta el auricular, responde con su tono calmado y profesional, pero hay una ligera tensión en su postura que Alyssa capta de inmediato. Tras unos segundos, cuelga, se recuesta en su silla y, finalmente, fija la mirada en ella.