Capítulo 1

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Alyssa Lauder es una periodista joven, pero prestigiosa, a su corta edad de 26 años ha conseguido hacerse de un nombre en la industria, gracias a su determinación, ética y su valentía para poner en riesgo su identidad con tal de destapar importantes escándalos de corrupción de las más grandes dinastías familiares del país, pero Alyssa no hace esto bajo su propio nombre, es demasiado riesgoso para ella, lo hace bajo el seudónimo de Martín Fletcher.

Una mañana lluviosa en Atlanta, Alyssa ya se estaba arreglando para su entrevista de trabajo en la compañía Pritzker, perteneciente a una importante familia estadounidense dueña de una gran dinastía que durante décadas se han encargado, entre otras cosas a la producción de hidrocarburos.

Alyssa tenía un plan, planeaba entrar bajo el cargo de asistente del CEO, un joven y según sus fuentes un novato Theon Pritzker quien había tomado el cargo tras el apresurado y sospechoso retiro de su padre Robert Pritzker, un importante empresario recientemente envuelto en un escándalo sexual con su joven secretaria, lo que Alyssa consideraba la razón de su reciente retiro, había pasado toda la noche preparándose e investigando meticulosamente a la familia dueña de esta gran compañía, recopilando cada pequeño o gran escandalo en un archivo que le permitiría acceder a ellos con facilidad en él momento que los necesitase

Del resto de la familia no había nada mucho más escandaloso, una tía envuelta en una relación con un joven 30 años menor que resultó "Sorprendentemente" ser un caza fortunas, una joven Molly Pritzker siendo una adolescente altamente problemática fotografiada siendo aún menor de edad consumiendo drogas fuera de una discoteca y el padre de Robert siendo investigado por intentar sobornar a un fiscal.

En cuanto terminó de acomodar su falda lápiz gris y alisar las arrugas de su blusa negra de mangas largas salió de su loft en el centro de la ciudad donde ya había un taxi esperándola afuera, le tomó una hora llegar a su entrevista en el edificio altavista debido al cargado tráfico que siempre había a esa hora en la ciudad.

Al llegar, la chica amablemente saluda a la recepcionista y le pide las indicaciones para dirigirse a la oficina de recursos humanos donde la entrevistarían. Al entrar a esta saludó a todas sus compañeras que competian por el mismo puesto sin recibir respuesta de estas, Alyssa es bella, pero tiene una belleza diferente a la de estas chicas, su cabello es ondulado y rojizo natural, tiene la cara llena de pecas que disimula con maquillaje y una piel muy blanca que combinaban a la perfección con sus grandes ojos verdes, es delgada pero eso solo hace que sus curvas resaltaran aún más.

Sus compañeras por otro lado, algunas eran el estereotipo de rubias voluptuosas, altamente hermosas y arregladas, sentadas con sus piernas cruzadas mientras contra el piso golpean sus grandes tacones, otras sin embargo eran bellezas más naturales, de esas mujeres a las que dios las dotó con un cuerpo y un rostro envidiables, Alyssa es hermosa, pero era más inteligente, tanto como para saber que esas mujeres habían llegado no por el puesto de ser asistente de presidencia, probablemente lo hacían para llegar a billetera de Theon y a su cama en el camino.

—Alyssa Lauder—Le llaman desde una oficina

La pelirroja se puso en pie levantando su curriculum con una mano mientras con la otra alisaba los pliegues que se habían formado en su falda, caminó hacia la oficina fingiendo nerviosismo.

Al entrar a la pequeña oficina minimalista se encontró con un rostro extremadamente familiar, la trabajadora de recursos humanos que la entrevistaría era Lucy Pevensy, una de sus compañeras de secundaria, la chica al darse cuenta de la presencia de Alyssa hizo una mueca confusa y mientras la saludaba con un abrazo no puede evitar mover los engranajes en su pequeña cabeza para identificar como salir de esa situación con éxito

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