Un Encuentro Inesperado

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El día del festival artístico finalmente llegó, y el campus de la Academia Daehan estaba lleno de vida. Las carpas decoradas, las luces brillantes y la música vibrante creaban una atmósfera festiva que emocionaba a todos los estudiantes. Haru se despertó esa mañana con una mezcla de nerviosismo y emoción; era su oportunidad de mostrar su arte al mundo.

Al llegar, se sintió un poco abrumado por la multitud. Había estudiantes exhibiendo sus obras en cada esquina, y el bullicio de risas y charlas llenaba el aire. Haru se dirigió hacia el área designada para su presentación, llevando consigo su cuaderno de dibujos. Cada paso que daba le recordaba la conversación que tuvo con Minho sobre abrirse a los demás. Tenía que hacer un esfuerzo consciente para no dejarse llevar por la ansiedad.

Cuando llegó a su puesto, se dio cuenta de que ya había algunos espectadores. Su corazón se aceleró al ver que Minho estaba entre ellos, animado y sonriendo mientras miraba su trabajo.

—"¡Haru! ¡Mira cuántas personas han venido a ver tus dibujos!" —gritó Minho, señalando a la multitud.

Haru se sintió un poco abrumado por la atención, pero la sonrisa de Minho le brindó un poco de consuelo. A su alrededor, otros estudiantes comenzaban a apreciar su arte. Haru respiró hondo y se concentró en su trabajo, sintiendo la energía del festival fluir a su alrededor.

Mientras estaba inmerso en sus dibujos, una voz familiar interrumpió su concentración.

—"¡Haru, esto es increíble!" —exclamó Kyung Soo, acercándose con una mirada de admiración.

Haru sintió que su corazón se detenía un momento. Kyung Soo se había acercado a verlo, y su presencia era innegablemente magnética.

—"Gracias… estoy tratando de mostrar cómo veo el mundo," —respondió Haru, sintiendo la calidez de la mirada de Kyung Soo sobre él.

—"Lo lograste. Tu estilo tiene una sensibilidad especial," —dijo Kyung Soo, su voz sincera resonando en el corazón de Haru.

Mientras hablaban, Haru notó que el entorno se desvanecía. Era como si solo existieran ellos dos en ese momento. Pero la tensión se rompió cuando Minho se acercó, interrumpiendo la conversación.

—"¡Ey, Kyung Soo! ¿Has visto las esculturas de Jin Woo? Son impresionantes!" —dijo Minho, tratando de incluirlo en la conversación.

Kyung Soo se volvió hacia Minho, una sonrisa se dibujó en su rostro.

—"No, aún no. Pero me encantaría verlas," —respondió Kyung Soo, su tono ligero.

Haru se sintió aliviado de no haber perdido completamente la conexión, y juntos comenzaron a caminar hacia donde se exhibían las esculturas. El trío exploró el festival, comentando sobre las diferentes obras y disfrutando del ambiente. Haru se dio cuenta de que estaba disfrutando de la compañía de ambos, sintiendo una especie de calidez en su corazón.

Mientras caminaban, se encontraron con Jin Woo, que estaba parado cerca de una escultura que había creado. Su mirada era contemplativa, como si estuviera evaluando su propia obra.

—"Jin Woo, esto es magnífico," —dijo Minho, aplaudiendo con entusiasmo.

Jin Woo giró la cabeza, sorprendido, pero rápidamente se recuperó.

—"Gracias, Minho. Solo traté de capturar un momento en el tiempo," —dijo Jin Woo, sonriendo levemente.

Haru observó cómo la interacción entre los tres se volvía más fluida. Se sintió feliz al ver a sus amigos conectarse, pero también un poco inseguro. Se preguntaba si algún día podría sentirse tan seguro y cómodo como ellos.

Poco después, el grupo se detuvo frente a un mural vibrante creado por un grupo de estudiantes. El mural representaba un mundo colorido y lleno de vida, y Haru sintió una chispa de inspiración al mirarlo.

—"¿Y tú, Haru? ¿Qué piensas?" —preguntó Kyung Soo, notando su fascinación.

—"Es hermoso… realmente capta la esencia de lo que somos," —respondió Haru, sintiendo cómo la pasión por el arte brotaba en sus palabras.

Minho asintió y comenzó a hablar sobre su interpretación del mural. La conversación se tornó dinámica y alegre, y Haru no podía evitar sonreír. Aunque aún había momentos de duda en su interior, el apoyo de sus amigos lo hacía sentir que estaba en el camino correcto.

Más tarde, cuando el sol comenzaba a ponerse, una pequeña ceremonia de premiación se llevó a cabo. Haru sintió una mezcla de nerviosismo y anticipación. Mientras el jurado anunciaba a los ganadores, él se esforzaba por mantener la calma. Sin embargo, al escuchar su nombre entre los premiados, no pudo evitar sentir que una ola de alegría lo envolvía.

—"¡Haru, lo lograste!" —gritó Minho, saltando de felicidad.

Kyung Soo sonrió de manera orgullosa, y Haru se sintió más agradecido que nunca por tenerlos a su lado. Mientras subía al escenario para recibir su premio, su corazón se llenó de emoción. En ese momento, comprendió que estaba construyendo algo más que solo un proyecto artístico; estaba creando lazos valiosos y amistades que lo acompañarían en su viaje.

A medida que la noche avanzaba y las luces brillaban más intensamente, Haru sabía que esta experiencia marcaría el comienzo de algo nuevo y emocionante en su vida. La combinación de amistad, arte y el apoyo de sus compañeros le daba fuerzas para seguir adelante, y estaba listo para enfrentar lo que vendría.

Hilos de DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora