Labial • 14 •

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Pov. Víctor:

Ya casi no volvemos juntos al depa, ahora solo pone excusas baratas o termina ignorándome cuando lo espero en la puerta de salida.
No me gusta volver a casa solo, su compañía siempre ha sido agradable. ¿Qué fue lo que hice mal?

—Pongan atención, jóvenes, esto les ayudará para su futuro.

Ni siquiera tengo ganas de escuchar a la tutora hablar sobre el mal comportamiento que "hemos" tenido últimamente este mes. Siempre habla en términos generales, cuando son solo tres chicos los que están causando el desorden. Lamentablemente, debido a la política, los profesores no pueden ser directos y decir nombres y apellidos, sino que hablar en general.

—¡Miss, una duda! —exclamó una chica del fondo, llamando la atención de todos —¿No se supone que hoy era el "viaje escolar" con los otros cursos o acaso ya lo cancelaron?

—Dios mío —murmuró, buscando algunas hojas en su escritorio —. Bueno, jóvenes, solo irán aquellos que tengan firmado la ficha de autorización.

—Licenciada, ¿a qué hora nos vamos?

—Si, licen, ¿cuándo nos vamos? Después tendremos pocas horas para disfrutar del complejo.

Y una ola de quejas se pronunció. La cara de la tutora era increíble, nunca la había visto con esa cara de estrés casi por estallar.
Lo único bueno es que así perdemos algunas clases por ese "viaje escolar".

El timbre sonó y todos se abalanzaron a la puerta, peor que animales desesperados. Ni siquiera sé porque hacen eso, de todos modos van a salir, ¿cuál es el apuro? Solo demuestran el poco respeto que se tienen entre ellos mismos. Y si así son solo para salir al patio, no quiero ni imaginar cuando llegue el bus.

—¡Víctor! —llamó una voz femenina, tocando mi hombro —¿Me puedes acompañar, por favor?

—Emh, hola...Astrid, ¿qué pasó?

Creo que ella es la única del curso que considero no se comporta como un animal, además de ser la mejor alumna, es agradable con la mayoría y tiene una belleza natural; de esas que casi no traen tanto maquillaje, solo labial y rímel.

—Bueno...es que nesecito ayuda para mover algunas cosas —indicó, jalando mi brazo mientras me guiaba a la bodega —. Además, podemos aprovechar para organizar lo que nos pidió la tutora para el viaje escolar.

—¿Qué cosa debemos organizar? ¿Cuándo fue que me lo pidió?

—Pues...nos encargó organizar algunos kit de emergencias, realizar la lista de asistencia y una bolsa con snacks para el camino.

—¿¡Está loca?! ¿De dónde vamos a sacar todo eso? ¡Ni siquiera sabía que estaba metido en eso!

—Víctor, Víctor, Víctor, esto nos lo pidió la semana anterior. ¿No lo recuerdas?

—Ni siquiera la escuché decir mi nombre...

—Bueno, no importa —murmuró, abriendo la puerta —. Para tu suerte, yo si compré las cosas que necesitábamos. Lo único que falta son más snacks, de esos compré pocos porque pensé que ibas a traer más tú.

—¡Gracias, Astrid, acabas de salvar mi vida! —indique, abrazándola de la emoción —No te preocupes por lo demás, yo me encargo de conseguirlo.

Ella me devolvió el abrazo de inmediato, pero cuando intenté soltarme, no se apartó. Parecía que realmente quería que la abrazara, así que dejé de intentar alejarme y esperé a que lo hiciera, eventualmente.
Grave error, ni siquiera intentó alejarse solo empezó acorralarme cerca de una pila de cajas, hasta que caímos y algunas cajas también cayeron cerca y sobre nosotros.

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⏰ Última actualización: Oct 27 ⏰

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El chico del apartamento 188 [ Mayictor & Spartor ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora