El ángel Kim - Fanfic -

11

— Park EumBi,necesito hablar contigo después de clases. — mire apenada al profesor y todos comenzaron a murmurar cosas.

¿Por qué son tan chismosos? Siempre me molestan, se burlan de mi por ser callada y no tener amigos.

— EumBi, — mire a mi derecha y una castaña me sonreía,era porrista que yo sepa. — habrá una fiesta en mi casa,irá toda la clase y estás invitada. Puedes llevar a Taehyung,está invitado también. — me anotó su dirección y siguió con sus cosas.

Yo sonreí levemente con las mejillas rojas, debería hacer amigos o conocer más gente.

Ser normal.

La clase terminó y me quedé a solas con el profesor.

— EumBi me preocupas mucho,tus notas son bajas y no te concentras en clase, dime ¿Hay problemas en casa? — tragué saliva nerviosa y comencé a jugar con mis manos.

— Lo siento,no ha sido un buen tiempo para mí. Estoy muy dispersa. — admití,sin decir que mamá me golpea.

— Me preocupas,como tú docente no puedo mirar hacia otro lado cuando hay un problema. Sea lo que sea, EumBi estoy para ayudarte, hay mucho apoyo de la institución. — asentí con la cabeza y sonreí levemente.

— Gracias,lo sé. — él me miró por unos segundos y asintió.

— Puedes irte. — tome mis cosas,hice una reverencia y sali de mi aula.

— EumBi,ven,vamos a comer juntas. — me sorprendí al ser arrastrada por las porristas.

Llegamos a la cafetería y fuimos a la mesa del equipo de básquet, los jugadores estaban ahí.

— Gracias por traerla. — dijo Hoseok con una sonrisa y me hizo señas de sentarme a su lado.

Me senté junto a él y pasó su brazo por mis hombros.

— ¿Cómo estás? — ya tenían comida en la mesa y hablaban animadamente.

Me sentía extraña ahí sentada, los demás miraban con curiosidad hacia nuestra mesa.

¿Cómo no? Si el bicho raro está con los populares.

Al cruzarme con la mirada de Taehyung,deje de mirarlo y presté atención a Hoseok.

Hay dos grandes grupos de populares aquí, los deportistas y porristas, y por otro lado, los lindos y delicados.
Taehyung pertenece al segundo grupo.

— ¿Qué tienes aquí? — Hoseok tocó mi cuello y lo aleje rápidamente.

— Nada,solo me golpee. — mentía, seguro tenía un moretón.

— EumBi,estás rara. — dijo mirándome a los ojos.

— Debo irme. — me puse de pie y salí de la cafetería.

Recordar la pelea con mamá me ponía triste, decidí subir a la azotea para estar sola un rato.

Subí las escaleras y al salir,el sol me dió en la cara. El día estaba hermoso.

Fui a sentarme y cerrando los ojos respire hondo.

— ¿Por qué es tan difícil hacer las cosas bien? — dije frustrada.

— Porque es más fácil fallar. — me gire y en él extremo contrario a mi, sentado al borde del edificio estaba un chico.

Parecía grande,cabello azul, ojos negros y un corte muy rebelde,llevaba su uniforme mal puesto y dejaba ver tatuajes en su piel. Brazos y cuello.

— ¿Terminaste de escanearme? — me sonrió ampliamente y sentí mis mejillas arder.

Que vergüenza.

— Lo siento. — susurré y desvíe mi mirada.

— Tranquila,me gusta que me miren. ¿Quieres uno? — lo mire y me ofreció un cigarrillo.

— No fumo, gracias. — él encendió uno y comenzó a fumar.

— ¿Te golpean en tu casa? — abrí los ojos a tope y negué con la cabeza.

— ¿Quién te dijo eso? — dije asustada.

Él sonrió ampliamente y me señaló.

— Lo deduje, te pareces a mi cuando tenía tu edad. — miró hacia el cielo y soltó humo.

— ¿Mi edad? —

— Si, — me miró — soy de último año. Jeon Jungkook, un gusto. — sonreí levemente.

— Park EumBi. — dije tímidamente.

— Lo sé,eres algo popular en el último año, Jung y su grupo siempre hablan de ti. — fruncí mi ceño y no supe que decir.

— ¿Por qué no te veo nunca? —

Él soltó una carcajada y me miró.

— Nunca prestas atención a nadie,siempre estás en otro mundo,en la biblioteca,etc. Disculpa Pero no piso una biblioteca ni que me paguen. — ambos reímos y terminó de fumar.

— No soy buena estudiando, solo busco paz mental. — admití.

— Te entiendo,por eso vengo aquí siempre. — ambos sonreímos y me dió su celular.— Dame tu número. — ordenó.

Rei divertida Pero termine dándole mi número de teléfono.

— Fue un placer verte Park EumBi. — se fue y me quedé sentada con una sonrisa.

Por fin podía hacer un amigo.