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— ¿Seguirás huyendo por las madrugadas?

— Oh, papá, bueno... Yo, eh.

— ¿Creías que no me había dado cuenta Menma?

— No lo había pensado antes, ¿Puedo ir, papá?

— No te dije que no fueras, solamente pregunté si seguirás llendo.

— Si no te molesta, quisiera seguir practicando con Sasuke.

— Ve— el mayor le hizo señas con la cabeza— es mejor a que te quedes encerrado acá.

Menma corrió a abrazar a su padre, sabía que el Uchiha lo amaba y que hacía todo para protegerlo a él y sus hermanos. Se dirigió a la puerta y partió rumbo a donde se encontraba la otra versión de su padre.

— Hola Sasuke, ¿Cómo estás?

— Bien, ¿Tu qué tal?

— He tenido mejores días, pero, no me quejo.

Entrenaron, a eso se dedicaban, era la manera en la que Menma podía soltar todo lo que se había obligado a reprimir, pero en el tiempo en el que había estado con la otra versión de su padre, pudo dejar la gran carga que el solo se había puesto sobre sus hombros.

Dos meses. Ya habían cumplido dos meses en esa maldita Konoha, Sasuke y sus hijos jamás habían imaginado el odiar a su amada aldea, a su hogar, pero, esa no era su casa, no era su sitio, solo era una vana simulación de algo que no sabían si podrían volver a ver. Karin... Pobre mujer, había intentado de todo, Sakura y ella estaban moviendo cielo, mar y tierra para lograr traer de regreso a la familia Uchiha, mientras intentaban hacer que el resto no se desvaneciera, pero era casi imposible, las tres hermanas solían ir temprano a visitar a toda su familia, desde que Minato había desaparecido Naruko y Sarada no dejaban a la pequeña Himawari por ningún momento, se imaginaban a su madre riñendolas por no haber protegido a su familia, así como él lo había echo.

— Menma, quiero hablar contigo.

— ¿Por qué querrías hablar conmigo Boruto Uzumaki?

— No lo sé realmente, solo sé que tengo la necesidad de hacerlo, de sentarme a conversar contigo.

— Está bien, pero, vayamos a otro lugar.

Ambos chicos se fueron hasta el bosque, según Boruto, era el mejor lugar.

— ¿Cómo era tu vida antes de llegar acá?

Menma tomó un respiro profundo— Pues, andábamos aún acoplandonos a la muerte de mamá— soltó con tristeza.

— Oh, ¿Y cómo murió? Ya sabes, tu madre.

— Salvando Konoha, hubo una invasión, querían acabar con la aldea, él junto a mi padre pelearon, cuando mamá vió que no tenían oportunidad sacó a papá de la pelea, utilizó todo su chakra combinado con el de Kurama y eso lo mató, bueno, eso nos contó papá.

— ¿Cómo era su relación?

— Increíble. Solíamos entrenar, detras de mi casa teníamos un campo de batalla, teníamos comidas familiares los sábados y domingos, se juntaban mi tía Karin y Sakura, al igual que los tíos Itachi y Shisui, eran momentos agradables.

— Suena bien.

— Lo era.

— ¿Y con Sasuke?

— Más de lo mismo, siempre ha estado al pendiente de nosotros y cuando mamá murió, aún más, trata de no faltar a ninguna comida, de ir con nosotros a jugar, entrenar y a los mellizos suele acostar los hasta que se queden dormidos.

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