Naruto y Sasuke, sería el mejor reencuentro después de la muerte y la desesperación escondida.
¿otra vez un viaje entre dimensiones?
La respuesta es simple, SI
Segunda parte/continuidad de "Dos mundos opuestos"
— ¿Menma, seguirás sin comer?— habló el mayor— ¿Tienes algo o necesitas algo?
— No papá, gracias de igual manera.
El primogénito Uchiha había regresado a casa después de una larga y tediosa revisión, querían saber exactamente el porqué había perdido el control, cuánto daño podría causar y hasta qué punto podría llegar con el chakra que poseía.
— Sasuke me dijo que si querías salir a entrenar aún con él, el no tendría ningún problema.
— Claro, me gustaría.
— Tus hermanos ya están dormidos, ¿Podrías decirme que te pasa?
— Nada papá.
Mentía, desde que había abierto los ojos, solo una cosa pasaba por su cabeza, ¿Cómo haría para perder el control? En clase habían aprendido una vez a materializar cosas por medio del genjutsu,quería hacer eso con su madre, pero, ¿Cómo? Le había prometido no hacer nada al respecto, sí, ¿Le obedecería? Por su puesto que no, Menma solo estaba pensado en quien podría ayudarlo con su cometido y había nada más una persona en su cabeza, alguien con palabras hirientes y un corazón destrozado. Se imaginaba que probablemente en ese lugar no sabían nada de técnicas avanzadas, así que por una parte eso podría facilitarle las cosas.
— Hijo, sabes que estoy para ayudarte, para apoyarte y para que juntos luchemos contra cualquier tipo de adversidad— abrazó al pequeño, Menma dejó que su cuerpo se llenará de calidez al sentir el apoyo de su padre, sabía que Sasuke era el mejor papá del mundo.
— Gracias papá, si pasa algo yo te cuento— se sentía mal por ocultarle algo tan importante a su progenitor, pero sentía que no era buena idea hablarle de lo que había pasado mientras estaba inconsciente— gracias por siempre estar al pendiente.
— ¿Y cómo no estarlo? Ustedes son la muestra del inmenso amor que tu madre y yo nos tuvimos, por ende si lo amé a él, tengo que cuidar lo que Naruto amó con todo su ser, a ustedes y por obviedad yo también los amo demasiado.
— Te amo papá.
— Yo más hijo mío.
Menma normalmente andaba en la luna, así solía decir Naruto al verlo tan sumergido en sus pensamientos, había dejado ese hábito ya hace un tiempo pero ahora estaba volviendo, se encontraba constantemente viendo a la nada, soltando algún suspiro desesperado y jugueteando con sus manos. No le prestaba atención a los demás, solo quería organizar bien sus prioridades y sus posibles oportunidades.
— ¡Menma te estoy hablando!— dijo el menor exaltado— ¿Tienes algo?
— No Minato, solo estaba pensado.
— ¿En qué? — habló el muchachito— ¿Por qué últimamente pareces inerte? Cómo que solo tu cuerpo estuviese vivo pero tu mente no.
— Dile a papá que tuve algunas cosas que hacer, te veo al rato Minato— desordenó el cabello de su hermano y se dirigió rumbo a la puerta para salir sin siquiera dejar al menor dar alguna respuesta.
Primero comenzó a andar sin rumbo alguno, cuando salió de casa lo tenía claramente previsto pero ya dando algunos pasos por las calles de Konoha se sintió mareado, como que todo lo que tenía en su mente se hubiese esfumado por arte de magia.
— ¡Menma!— gritó el rubio— maldición— terminó susurrando por lo bajo.
— Hola Boruto— contestó soltando una risita.
— Lo siento, se supone que andabas de encubierto, pero no me has dicho tu nombre falso.
— No, son Boruto y mi padre quien tienen disfraces y una identidad falsa, Minato y yo no, ya que no somos parecidos a nadie.
— Oh, eso tiene sentido, ¿Quieres ir a entrenar un rato, o a pasear quizá?
— Sí, me haría bien.
— ¿Tu cuántos años tienes? No te lo había preguntado antes.
— 16, los acabo de cumplir.
— ¿Tu mamá también tiene 32?
— No, él tenía 34 cuando murió, son dos años de diferencia entre mi madre y tu padre.
— ¿Entonces, por qué nos llevamos cuatro años?— preguntó mientras pateaba una roca cada vez que daba un paso.
— Mi madre me tuvo a los 18, quizá eso tenga que ver.
— ¿Y, bueno, tu mamá cómo era?
— Te lo muestro— Menma recreó las mismas poses que había echo Minato con las manos, salió un humo y luego se comenzó a proyectar la figura del rubio, pelo más o menos largo y sin duda, más joven y guapo— es mi madre.
Boruto no pudo quitar su vista de Naruto, por dentro sintió como algo se rompía, no sabía que era pero, le lastimaba el saber que su padre en esta realidad se veía cansado, agotado, que el mismo sueño que había alcanzado lo estaba consumiendo pero sabía que el otro yo de su padre no pasaba por lo mismo, a pesar de ser mayor, tener el mismo puesto he incluso una familia más numerosa, podía con todo. Quizá estaba entendiendo la postura de Sarada, no la de agarrarse a golpes con Menma porque él no tenía la culpa, ellos tampoco la tenían, eso lo entendía, pero sentía que él, su hermana y su madre tenían culpa en que su padre estuviese así de destruido.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— Cuando mamá era joven tenía el cabello corto, según se lo fue dejando crecer después de que los mellizos tenían como cuatro porque le gustaba presumir su cabello mientras entrenaba, era un presumido— río un poco con una notable nostalgia.
— ¿Quién conquistó a quien?
— ¿Ah?.. quizá los dos, mamá dice que él iba tras papá y mi padre dice que él era quien iba tras mi madre, en fin, yo digo que ambos se gustaban y pues terminaron juntos.
— Eso suena a ellos.
— Si... Boruto, no sé si nos iremos de acá y eso sin duda me asusta.
— Tranquilo Menma, yo creo que papá y los demás están haciendo hasta lo imposible para hacer que regresen.
— Mi familia también, bueno, yo creo que eso hacen.
— Pero, si nos quedamos aquí, ¿Tendríamos que ir a misiones y eso?— dijo preocupado— es que ya le pregunté a Sasuke cuanto ganan y es una miseria, ganaba más mi perrita en misión que ustedes— era Naruto, sin duda alguna Menma se parecía mucho a su madre.
Boruto soltó una carcajada, el moreno le causaba mucha risa, sentía que con Menma había encontrado al hermano que nunca había tenido, y a la larga era su medio hermano, no de esa dimensión pero si lo era porque tenía cierto grado de respeto y cariño por él.
— Boruto, tengo que contarte algo, no sé cómo lo tomes o que es lo que opines pero por favor, yo no se lo he dicho a nadie así que tu tampoco se lo digas a nadie.