Capítulo 1: ¿Quién es Catalina Winston?

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La luz matutina se adentro con cautela en la habitación, llegando hasta el punto de rozarme los ojos y causarme un cosquilleo en el rostro, me moví de la cama lanzando un gemido molesta, era demasiado temprano y quería seguir durmiendo.

Entonces alguien toco a la puerta de mi habitación.

——Señorita, su desayuno esta listo.

De la nada mi cuerpo cobró vida y me senté a una gran velocidad—— acababa de decir ¿desayuno—— me di el levantón y corrí en dirección a la puerta mientras me arreglaba un poco el cabello, jale la cerradura y abrí.

——Muy buen día señorita Winston, le he traído su desayuno favorito—— dijo una mujer con vestimenta de servidumbre.

¿Winston? pregunté en mis propios pensamientos.

——Las demás criadas vendrán en una hora para ponerle el vestido de su debut y hacerle las correcciones antes del gran día—— dijo mientras ingresaba al cuarto y dejaba la bandeja en una mesita.

¿debut? ¿gran día? parpadee perpleja.

——Con su permiso, me retiro—— la mujer se desplazó con discreción hasta que su figura desapareció en el pasillo.

En completa soledad comencé a pensar que rayos estaba sucediendo, ahora que veía con mayor claridad, jamás había estado en un cuarto tan hermoso, daba la impresión de una elegancia estilo romance gótico, alce una ceja dubitativa y me toque la pijama, se sentía sedosa, mis manos se pasearon por mi cuerpo con suavidad, sin duda se trataba de una ropa muy fina.

Unos pensamientos llegaron a mi cabeza repentinamente, de hecho, ayer tuve un sueño muy extraño, soñé que moría atropellada por un auto, más no obstante, no recuerdo nada más al respecto, lo que si puedo afirmar con mucha seguridad es que se sintió como algo bastante real.

Me acerque al tocador y me vi al espejo.

¡Dios mío! ¡¿y esta mujer tan hermosa?! ¿se trataba de mi? ante el reflejo se posicionaba una joven de piel clara, con unos ojos rojos profundos y brillantes como el rubí, tenía el cabello lacio y de un negro azabache que le llegaba a nivel de las caderas.

Me observe mientras me tocaba la cara, las pestañas largas negras y enchinadas naturalmente le daban coquetería a la mirada, los labios anchos y con un tono rojo casi del mismo color que los ojos, un rostro muy esbelto y fino.

Me sentía como una princesa.

Estuve en quietud durante breves segundos hasta que alguien volvió a tocar la puerta de la habitación.

——Catalinaaaaa—— dijo una melodiosa voz.

——Toc toc, ¿Cómo amaneció mi preciosa hija?—— preguntó una señora voluptuosa con el rostro muy tierno.

no supe que contestar, solo la mire boquiabierta.

——¡Oh! ¡primor! debes estar muy emocionada por el baile de debutantes y más porque será en 3 meses, mi querida hija ya llegó a la mayoría de edad—— dijo mientras me acariciaba el pelo con cariño_ en que momento creciste tanto.

¿Y esa señora?.

——¿Madre?—— cuestioné confusa.

——¿Qué sucede cariño?—— contestó al mismo tiempo que se paseaba por la habitación_ ¿aún no has desayunado?_ volteó a verme con un rostro juzgón_ niña, tienes que comer, necesitas fuerzas para la siguiente temporada, estamos hablando del debut de la primera hija de la familia Winston, serás presentada en sociedad y necesito que consigas un esposo lo más rápido posible.

Abri tanto los ojos que por un momento pensé que se saldrían.

——hablas de ca-ca-casarme—— titubeé.

_por su puesto_ dijo acentuando las palabras con mucha claridad en la voz_ ¡pero claro que hablo de casarte!_ exclamó levantando los brazos energéticamente_ y no pienso aceptar ninguna queja al respecto.

Mi supuesta madre observo con detenimiento la bandeja de comida_ muy bien, un plato nutritivo en frutas y carnes, necesitas digerirlas ya mismo, tienes que comer como máximo 40 minutos antes de la llegada de tu vestido o sino vomitaras.

——Si, madre—— contesté por reflejo

La dama mayor, que por cierto, tenía mucho porte, se retiró no sin antes decirme que me apurara.

Medite las cosas por un momento mientras degustaba mi desayuno, algunas preguntas abordaron mis sensibles pensares ¿que tal si en verdad había muerto? ¿y si reencarne en otra persona? o algo parecido, tal vez tendría un poco de sentido lo que estaba pasando. Desde que me levanté habia estado presentando mareos y algunas veces venían recuerdos de esa tal Catalina a mi mente.

Sentada en la mesita desvié la mirada al frente mío, donde pude ver mi reflejo.

Con que Catalina Winston eh......pero que suceso tan interesante.

Catalina la Duquesa de la Familia WinstonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora