11. Como Una Película

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(Kailey's POV)

La hora de la verdad se acerca.

Me he puesto ya el vestido rosa de flores blancas que voy a usar hoy en la fiesta de la mamá de Parker. Me he puesto maquillaje pero para lucir natural, que todos sabemos que aunque parezca natural, implica bastante maquillaje. E incluso me he arreglado el cabello haciéndome unas ondas que sé que dentro de quizás una hora ya no estarán por tener el cabello tan liso.

Parker dijo que estaría aquí a las ocho de la mañana. Son las 7:45 am. Solo necesito lavarme los dientes y ponerme el par de zapatillas blancas habituales. Que se vea delicado, tierno pero a la vez cómodo.

Busco en la refrigeradora una manzana para desayunar mientras llega Parker. Una vez terminándola, voy a lavarme los dientes y a ponerme las zapatillas.

En eso, suena el timbre de la puerta. Miro mi reloj y son apenas las 7:55 am. Si es Parker, es muy apresurado.

Reviso que haya dejado todo en orden y todo apagado. A veces mi ansiedad no me deja irme tranquila. Luego corro a tomar mi bolso y las llaves. Me doy una última mirada al espejo y me acomodo y a abrir la puerta.

Al abrir me encuentro con Parker.

Él solamente me mira, veo como sus ojos navegan por mi cuerpo de arriba a abajo pero no veo señal de tomárselo a forma pervertida. Todo lo contrario. Está nervioso y creo que se ha quedado sin hablar.

Yo lo miro de igual forma.
Está vestido con una camisa blanca, unos dos botones de ella están sin abrochar haciendo que se vea un poco la piel de su pecho y está usando unos jeans negros con zapatillas converse.

Me da una sonrisa con su rostro completamente iluminado.

-¡Wow! T-te ves hermosa -es lo primero que dice. Siento que el corazón me late fuerte en el pecho y las palabras se me quedan trabadas en la garganta. De hecho, siento la garganta seca y quedo estática allí con los ojos abiertos de par en par.

Esto se siente tan película donde la chica tiene su primera cita con el galán de la historia. Ya que se repite el mismo cliché de que él se quede sin palabras al verla por primera vez en su puerta y ella también, se quede hipnotizada al verlo por lo guapo que está.

-Gracias-digo de inmediato -T-tú también te ves guapo -le contesto de la misma forma que él. Es lo único que se me vino a la mente.

Sí, definitivamente es una película.

Una sonrisa nerviosa aparece en sus labios nuevamente y también en los míos.

Me quedo ahí sin saber qué hacer porque se me ha olvidado todo.

Trato de componerme inmediatamente. Vale, somos amigos. En la última semana hemos estado hablando por mensajes de texto. Nos tratamos como amigos porque somos amigos. Nada más.

Así que el decirle que se ve igual de guapo es solamente eso. Un cumplido de amigos.

Mis mejillas se enrojecen un poco porque mi ansiedad me come al que quizá ahora él sienta que se lo estoy diciendo por otros motivos.

-Gracias -él dice también con una sonrisa nerviosa porque sí, no se esperaba ese cumplido de mi parte -. Creo que he pasado el examen.

Me guiña un de manera juguetona y en realidad eso hace que mi corazón lata aún más fuerte que antes. Trato de tomar aire y hablar normal.

-Sí, yo al menos espero que no vaya inapropiada-digo pero él me interrumpe. De hecho me mira fijamente y a veces su mirada recorre mi cuerpo.

-No, en serio, así te ves perfecta-me dice rápidamente -. El vestido, el cabello, el maquillaje, incluso las zapatillas.

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