Maldición 🩸 ; Kookmin

007.

Eran casi las 2 de la tarde y por alguna razón mis pies pesaban, no me dejaban levantarme estaba casando y un poco mareado, no recordaba nada de la noche anterior.

Me levante y me metí a la bañera, por lo general siempre acostumbro a bañarme con agua fría pero ahora necesitaba un baño de agua tibia, uno donde mi mente descansara.

JIMIN

Ese pequeño rubio vino a mi mente y en ese momento recordé, recordé lo malditamente mierda y basura que había sido con el, salí rápidamente de mi bañera, me vestí y me arreglé un poco, de inmediato baje a la sala pero ahí estaba mi madre con su típica cara de accidente o alguna mala noticia, al verme se acerco y me abrazo como si mi padre o mi hermana hubieran muerto.

— Lo siento cariño — se disculpo y mi corazón empezó a latir con fuerza.

— Mamá que pasa? — la aleje tomándola por los hombros viéndola a los ojos esperando que no fuera algo malo o al menos no al punto de quedar en la ruina.

— Jimin — hablo con un tono de preocupación.

El mismo tono que usa en las llamadas pata decirle a mi padre que estornude y que no quiero dejar que me revise un doctor por lo que me tranquilicé, que la había pasado? Acaso... se había enterado de lo de anoche?

— El esta en el hospital, anoche se desmayo — me miró, pero ahora con esa mirada interrogativa — Kook hijo tu...

— No se nada — solté rápidamente.

No iba a permitir que mi madre se enterará, sabía que ella amaba a Jimin y no como un hijo más si no más bien como el padre de mis hijos, pero yo no, yo no lo quería así.

Desde pequeños lo supe, el siempre fue muy obvio en todo e incluso cuando fingía molestarse por sus juguetes solo para que yo acariciara su cabello o lo abrazara y yo lo quería, claro que lo quería pero no como chico lo quería como un amigo, un simple amigo, pero al parecer no pude ser lo suficientemente claro desde un inicio.

Aunque ahora que lo pienso a lo mejor y si fui un egoísta, tal vez, solo tal vez disfrutaba ser su primer amor.

Tal vez si me gustaba la atención que me daba, tal vez me gustaba alardear de lo muy enamorado que lo tenia, por eso tampoco podía aceptarlo, no era que yo no lo mereciera o en viceversa, era como un 50/50 no el a mi ni yo a él, o bueno así es como yo lo interpretada.

Los días pasaron y cada domingo los Park venían a almorzar con la pequeña pero gran notoria diferencia que el asiento a mi lado seguía vacío.

Mi madre de vez en cuando me pedía acompañarla a visitar a Jimin pero siempre decía algo como Tae Hyung me va a visitar o ya quede de ir a un partido de baloncesto, ella a regañadientes aceptaba pero aun así insistía en la próxima debía ir pero nunca había una próxima porque me siempre me salia con la mía.

Los días se pasaron rápido todo era perfecto para mi y es que literal no había porque quejarme, no había escuela, pero eso se acabó, se terminó ese día y ese puto y jodido día.

No odiaba a Jimin nunca lo hice pero en estos momentos deseaba que ese idiota hubiera muerto camino al hospital, tal vez no había sido lo suficientemente rudo, u hostil, o tal vez me falto decirle algo más cruel? No lo se, pero me arrepientia de no haberlo hecho.

— Como pudiste?! — grito exaltada mi madre — Jimin esta así por tu culpa Jeon! Acaso no te das cuenta?! Como pudiese lastimarlo?! — me grito de manera fuerte.

— Pero...

— Sin peros Jeon Jungkook — hablo sería y decidida — te das cuenta del daño que has hecho?

— Mamá yo no hice nada malo...

Sentí mi mejilla arder.

Así es.

Mi madre me había dado una bofetada.

Ella nunca ma había golpeado.

Ni siquiera un pellizco o un jalón de orejas.

Pero hoy había cambiado todo.

Por culpa de EL.

Ese maldito niñito de mierda.

Ojalá se estuviera pudriendo.

Lo que yo no sabía era que desde ese día mi vida en ese hogar será un infierno, un maldito agujero sin salida, cada vez que estuviera en ese lugar mi vida sería una completa mierda.

— Jungkook — susurro mi madre "arrepentida" por lo que había hecho.

Mi hermana estaba estupefacta viendo da la escena.

— Mamá por que lo golpeaste?

Mi mamá bajo su vista a la mano con la que me había golpeado y con esa misma mano se empezo a golpear y a llorar y a regañarse a si misma por lo que claramente Aeri y yo quedamos en shock, pero rápidamente Aeri se acerco a ella para detenerla.

Sonará estúpido o tal vez cobarde pero yo no pude hacer nada, por alguna razón mis pies no se movían, solo me quede observando mientras Mamá gritaba cosas como "soy un monstruo" o "pero que he hecho?" o "deberia morir" cosas tan incoherentes.

Sin prestarle mucha atención subí a mi habitación y cerré con llave, ya que sabía que después de que se calmara, mi madre intentaría hablar conmigo.

A las semanas nos enteramos de que Park se iría del país.

Que suerte.

No volveré a ver a ese hijo de puta.

El muy pijo de mierda solo servía para aserce la víctima.

Aunque lo intentará no podía dejar de pensar en las cosas negativas que quería que le ocurrieran.

Jamás habia sido alguien de desear el mal a otra persona, siempre me daba igual lo que cualquier otro hiciera, siempre fui yo y solo yo.

Pero con el había sido diferente, mi odio no tenía un punto pico, no tenía una sumatoria definida, simplemente iba aumentando cada vez más.

Lo odiaba.

Siempre lo odiaría.

Y así lo recordaría por el resto de mi vida.

Como el imbécil que arruino mi vida.

La persona que más había llegado a odiar y a detestar.

PARK JIMIN